Donald Trump es uno de esos tipos que fanfarronea sobre todo. Es por eso que en más de una ocasión le ha dicho a todo el mundo que es un fanático de la comida rápida y lo ha demostrado comiendo bastante, en un espectáculo que debería ser catalogado casi como algún tipo de perversión sexual. Y si hablamos de la comida rápida, hay una que es la favorita de todos nosotros: la pizza.
Lo siento burritos y hamburguesas, pero no hay día que sea triste si tenemos una pizza en nuestro corazón. O al menos así lo creí hasta que Donnie nos demostró que puede arruinarlo todo, pues no se conformó con apoyar racistas, xenófobos y homofóbicos en su gobierno.
Todo porque en su rascacielos de Nueva York, la Torre Trump, sirve una pizza que tan sólo puede ser considerada como un crimen para la humanidad.
“Muy feliz de estar de vuelta en Nueva York, específicamente por la famosa pizza de la Torre Trump”.
Según el medio Mirror, Annie -reportera de la Casa Blanca- está “casi seguramente siendo sarcástica” al referirse de esa forma a la pizza que se vende por .50 dólares.
“He tenido mejores pizzas de microondas”.
“Luce familiar
Alguien vomitó en la alfombra roja de los Premios Emmy”.
Esto recuerda a varios la reseña de la periodista Tina Nguyen para Vanity Fair, en la que señaló que la cocina de Trump es, probablemente, el peor restaurante de Estados Unidos. Bien hecho Donnie, gracias por arruinarnos otro placer de la vida.
Source: UPSOCL