Durante 2020, los testigos de Jehová publicaron la Traducción del Nuevo Mundo en 33 idiomas: la mayor cantidad en un año desde que se publicó su primera traducción en 1950. Para el 31 de diciembre de 2020, la Traducción del Nuevo Mundo estaba disponible en 195 idiomas.
Uno de los muchos hitos en su trabajo de traducción durante 2020 se alcanzó el 15 de febrero, cuando Geoffrey Jackson, miembro de la junta administrativa de los Testigos de Jehová, anunció que había terminado de producirse la primera Biblia completa en lenguaje de señas americano. En el evento celebrado en Florida, en el que los Testigos publicaron dicha traducción, Jackson dijo: “Hasta donde sabemos, los testigos de Jehová somos la primera organización o grupo que publica la Biblia completa en lenguaje de señas americano. Y probablemente se trate de la primera Biblia completa en lenguaje de señas en el mundo (y) en la historia de la humanidad.”
Otro aspecto sobresaliente fue la publicación de la Traducción del Nuevo Mundo en bislama, un idioma hablado por unas 10.000 personas en la remota isla de Vanuatu, a unos 1.770 kilómetros (1.100 millas) al norte de Australia. Aunque ya existían traducciones de la Biblia en bislama, el costo promedio de 30 dólares puede resultar elevado para personas que ganan solo 15 dólares por día. Sin embargo, ahora hay una nueva traducción de la Biblia en bislama, gratis.
Los testigos de Jehová han producido y distribuido Biblias desde principios del siglo XX. Con el paso del tiempo, adquirieron los derechos de impresión de las traducciones King James Version y American Standard Version, entre otras.
Pero en la década de 1940 los Testigos comenzaron a trabajar en una traducción al inglés moderno. Un objetivo principal de su labor de traducción ha sido la restauración del nombre de Dios —Jehová— a los más de 7.000 lugares de la Biblia donde otros traductores lo han reemplazado por títulos como “Señor”. A partir de 1950, la Traducción del Nuevo Mundo fue publicada en secciones hasta que toda la Biblia se completó en 1961.
Respecto a la Traducción del Nuevo Mundo de las Escrituras Griegas Cristianas (o Nuevo Testamento), el comentarista bíblico británico Alexander Thomson escribió en 1952: “Está claro que esta traducción es obra de doctos hábiles y diestros que se han esforzado por plasmar todo el sentido verdadero del texto griego que puede expresarse en inglés.” Concluyó: “Nos gustaría ver a todos nuestros lectores usando la versión del Nuevo Mundo. Será un valioso aporte a su biblioteca” (The Differentiator, abril de 1952, página 52).
Después de revisar la posterior publicación de una parte de las Escrituras Hebreas (o Antiguo Testamento), Thomson declaró: “La recomendaría como un esfuerzo honrado y franco por traducir las Sagradas Escrituras al inglés moderno. No parece que se haga esfuerzo alguno por imponer doctrinas o teorías especiales”.
Décadas más tarde, la Traducción del Nuevo Mundo continuó recibiendo elogios de la crítica. En 2003, un profesor de estudios religiosos señaló en su libro, Truth in Translation: “La Traducción del Nuevo Mundo ha resultado ser la más exacta de las [nueve] versiones analizadas.” Continuó: “La mayoría de las diferencias se deben a su mayor exactitud, siendo esta una traducción conservadora y literal de las expresiones originales de los escritores del Nuevo Testamento” (Truth in Translation, páginas 163, 165.).
En 2013, los Testigos publicaron una versión revisada de la Traducción del Nuevo Mundo, que, entre otras cosas, utiliza un lenguaje actualizado para facilitar la lectura. El lenguaje simplificado también facilitó los proyectos de traducción.
La labor de traducción es llevada a cabo por equipos de traductores voluntarios que trabajan en las zonas donde se hablan los idiomas de destino. Todo el trabajo de traducir, publicar e imprimir que hacen los Testigos se financia mediante donaciones voluntarias. Esto permite que la Traducción del Nuevo Mundo esté disponible en todo el mundo de forma gratuita.
Los académicos y lingüistas que examinan las traducciones a menudo quedan impresionados.
Por ejemplo, la traducción en bislama publicada en 2020 fue elogiada por Carol Aru, M. A., una lingüista anteriormente asociada con la Universidad del Pacífico Sur, que ahora trabaja como consultora. Después de comparar la Traducción del Nuevo Mundo con otras Biblias en inglés y con la otra Biblia reconocida en bislama, dijo: “No es fácil traducir algunos de los libros del Antiguo Testamento como Génesis y transmitir el significado real, y no solo una traducción literal. Pero observo que su traducción hizo un buen trabajo asegurándose de esto”.
Debido a las muchas variaciones ortográficas del bislama, Aru dijo que a menudo tiene que hacer numerosas correcciones en los textos en dicho idioma, pero no vio ninguna necesidad de hacerlo con la Traducción del Nuevo Mundo.
Los testigos de Jehová proyectan publicar la Biblia, completa o en parte, en otros 36 idiomas durante 2021.