Cuando se revisan los antecedentes en las Copas del Mundo, hay que buscar desde las primeras ediciones para hallar un contexto en el que Argentina se haya retirado sin haber ganado aunque sea un partido. Precisamente hay que indagar hasta llegar a Italia 1934, edición en la que la albiceleste dejó por única vez ese registro negro.

De acuerdo con el diario español Marca, Después del subcampeonato en Uruguay 1930, la FIFA planeó el segundo Mundial con una particularidad extraordinaria: se llevó a avo con el formato de eliminación directa desde el inicio. Compitieron únicamente 16 seleccionados y el certamen arrancó con unos octavos de final que dejó a ocho equipos fuera de la competencia solo después de la primera fecha.

El 27 de mayo de 1934, en el inmueble Littoriale de Bologna y con el arbitraje del austríaco Erwin Braun, Argentina realizó su única aparición en esta Copa del Mundo. Bajo la dirección técnica de Felipe Pascucci, los sudamericanos perdieron por 3 a 2 ante el combinado de Suecia.

Al minuto 4′, Ernesto Belis marcó el primer tanto para los pupilos de Pascucci, aunque unos minutos más tarde Sven Jonasson (9′) puso tablas en el marcador para la escuadra europea. Argentina procedió a ganar nuevamente gracias al tanto de Alberto Galateo (48′). Pero Suecia siguió insistiendo y empató nuevamente, cuando Jonasson consiguiera su doblete en el minuto 67′. Por último, Knut Kroon, a once minutos del final, sentenció el partido con el que sería el marcador final de 3-2.

En Rusia 2018 el conjunto que está bajo el mando de Jorge Sampaoli intentará superar a Nigeria el próximo martes 26 de junio y pasar a octavos de final. En caso de conseguirlo, evitará repetir este registro negro del fútbol argentino en la historia de los Mundiales.