La legisladora de Bahía de Banderas, Mirtha Villalvazo apoya al cine mexicano con una visión nacional. Una diputada de película.

 

15 de octubre de 2019

 

Para Mirtha Villalvazo, diputada federal por el distrito III de Nayarit, conocer cómo se desarrolla la vida del cine en nuestro país nos permite darnos cuenta del crecimiento y comportamiento de nuestra sociedad, ya que así planteamos nuevas preguntas y horizontes, cuestionamientos indispensables para repensar las políticas públicas que incluyan y den voz a un mayor número de participantes, desde los realizadores hasta el público en general.

 

Resulta importante, que iniciativas de ley que pretenden incrementar el tiempo de exhibición de películas nacionales en las salas cinematográficas, como la propuesta de la diputada federal de Morena en el Congreso de la Unión, Mirtha Villalvazo, tengan resonancia en nuestra comunidad, ya que éstas nos permitirán impulsar la cultura cinematográfica de México.

https://noticiasecatepec.com/entretenimiento/cines-y-cine-mexicano-padecen-ante-la-pandemia/

 

La producción de cine nacional en el año 2019 registró 101 títulos de los cuales: 34% correspondió a documental, 65% ficción y 1% animación. Del total, 49% contó con apoyo de fondos públicos y 20% fue dirigido por mujeres. 

 

Es importante ahora destacar la importancia de las mujeres en la realización cinematográfica y audiovisual es fundamental para crear diálogos incluyentes y nuevos mecanismos de participación. 

 

A pesar de estos índices de producción cinematográfica incipiente, en términos numéricos, urge garantizar el acceso de todos los mexicanos a la variada producción fílmica nacional, ya que ésta es un reflejo de nuestras realidades, además de ser un derecho cultural y un derecho humano, porque intenta realizar la conexión de nuestra comunidad narrada desde las pantallas. Esto únicamente se podrá lograr garantizando más tiempo de exhibición en las salas de cine.

 

Únicamente en el 2019 de los estrenos nacionales, 74.26 % tuvo una permanencia de hasta ocho semanas en taquilla y acumularon más de 814 millones de pesos, mientras que sólo 3.96 % permaneció en exhibición 15 o más semanas, con un ingreso en conjunto de 75.5 millones de pesos, esto gracias a espacios como la Cineteca Nacional pertenecientes al Estado mexicano, si no, la exhibición hubiera sido casi nula. 

 

De los 101 estrenos mexicanos del año, 46% se exhibió en menos de 10 pantallas y 20% tuvo una duración de tres semanas en cartelera. De ahí la importancia de la propuesta legislativa de nuestra paisana.

 

Hablar de lo nuestro es referirnos a la diversidad cultural a través de historias y raíces reflejadas en la producción de cine y audiovisual. Una tarea fundamental es destacar las películas que nos identifican con nuestro pasado y presente indígena, con nuestra diversidad cultural y lingüística, con nuestras múltiples maneras de ser.

 

Sabiendo que la educación fílmica es pieza clave para el desarrollo no solo de la cultura cinematográfica sino general, la propuesta de la nayarita, Mirtha Villalvazo intenta sentar las bases para un mejor futuro para el cine nacional y su impacto en nuestra sociedad, generando con ello una saludable industria cinematográfica con nuestra propia identidad.

 

Mirtha Villalvazo consiente de nuestra realidad como nayaritas y mexicanos no desconoce que cada estado de la República tiene características y comportamientos diferentes a las visiones centralistas, pero que es fundamental dialogar y repensar nuevas políticas públicas que incluyan y visibilicen las barreras para el acceso de las audiencias al cine y el material audiovisual.

 

Gracias a la activa participación de nuestra paisana ahora podremos tener la oportunidad de ver enfoques diversos sobre el cine, ya sea de nuestras comunidades indígenas o del pensamiento latinoamericano, que nos enriquecerán y nos podrán ofrecer información inédita de utilidad para nuestros estudiantes, académicos e investigadores y abrir un nuevo capítulo de la manera de cómo consumimos el cine nacional propiciando la reflexión,  el diálogo, la imaginación y creatividad para generar propuestas y caminos para la participación comunitaria de todos los sectores involucrados, no solo en el quehacer cinematográfico sino de todas las actividades productivas de México.

 

Datos: 

2019: PIB del cine: 20 110 millones de pesos. 30 946 puestos de trabajo ocupados. 40.6 % de las personas ocupadas fueron mujeres. Los hogares gastaron en cine 34 596 millones de pesos. 

 

2019: 216 largometrajes producidos. 

20% de las producciones fueron dirigidas por mujeres. 

17.2 millones de pesos: costo promedio por película. 

49 % de los largometrajes contó con apoyo gubernamental. 

128 centros educativos en México imparten estudios relacionados con el cine y el audiovisual.

 

14 largometrajes con temática indígena, bajo los criterios de locación, que la historia se centre en comunidades o pueblos originarios, que haya diálogos en una lengua originaria o que el realizador sea oriundo de una comunidad indígena. Uno de ellos fue el Sueño de Hikuri, dirigida por Abraham Torres, que retrata la cultura wixárika.

 

2019: 341 millones de asistentes a salas de cine; 35.2 millones para cine mexicano. 454 estrenos; 101 nacionales. De los 101 estrenos mexicanos, 45% se exhibió en 10 pantallas o menos. 

30 % de los estrenos mexicanos tuvo actividad publicitaria en medios impresos y electrónicos

 

De la asistencia registrada, 96% correspondió a la oferta comercial. Las 10 películas más vistas fueron de origen estadounidense: Toy Story 4 lideró la taquilla con 25 millones de espectadores. Por su parte, el cine nacional obtuvo sólo 10 % de las entradas al contabilizar 35.2 millones de espectadores. 

 

De los 101 estrenos mexicanos del año, 46% se exhibió en menos de 10 pantallas y 20% tuvo una duración de tres semanas en cartelera.

 

En Nayarit se celebran anualmente el festival Ultracinema y la muestra de cortometrajes.