Aseguró que los nayaritas no se rajan, son valientes y trabajadores.

En entrevista a un año de que en México comenzarán las afectaciones por la pandemia por Covid-19, la diputada Mirtha Villalvazo explicó cómo funcionaron los comedores comunitarios que creó, en los cuales se prepararon alimentos para familias vulnerables de 15 localidades.

Bahía de Banderas.- Uno de los principales factores que aquejan y le duelen a Mirtha Villalvazo es ver cómo “hemos sido arrasados con una pandemia que no esperábamos, porque ninguno de nosotros estábamos preparados para esto”.

Eso fue lo que la llevó a impulsar en los meses más difíciles de la contingencia sanitaria, en 2020, junto con un grupo de voluntarios, más de 31 comedores comunitarios en Bahía de Banderas, los cuales se dedicaron a ofrecer alimentos a pobladores de 15 localidades.

San Juan de Abajo, San José del Valle, Valle de Banderas, El Porvenir, San Vicente, La Misión, Valle Marlín, San Clemente, Mezcales, Valle Dorado, Jarretaderas, Bucerías, Sayulita, San Pancho y El Guamúchil, fueron los beneficiados.

En meses recientes, se pudo ver a la diputada preparando los alimentos junto con las vecinas de las distintas poblaciones, tal fue el caso del fraccionamiento Jardines del Sol y de Corral del Risco, en donde se repartieron más de 200 platos de comida.

“Me siento muy complacida por haber podido llevar un poquito de alimento a los hogares de los bahíabanderenses, pero más que ello, como diputada federal de mayoría tengo a cargo nueve municipios más, y acudí a los pueblos para hacer comedores comunitarios y poder llevar la comida a su casa”.

Fueron más de 50 Comedores los que han llegado a las diversas localidades, en cada uno de ellos se repartieron dos centenares de platos de comida, lo cual suma un total de 10 mil platos con alimentos en beneficios de los pobladores de bajos recursos.

“No sabes la satisfacción que me dio ver cómo un adulto mayor o un niño te daba las gracias al ver que tenía el plato en la mesa servido y que por muchos días no tuvieron que comer. Lo que hoy estamos viviendo es diferente, ha estado mucho tiempo y ha venido a despertar en cada uno de nosotros. El mayor impulso que me pudo haber dado esto es poder ayudar, poder servir y lo voy a seguir haciendo con mucho gusto”.

En ese sentido, confió en que los pobladores que escuchen su mensaje puedan ir a darle un poquito de ayuda al vecino o al amigo, “porque la verdad esta pandemia nos ha venido a enseñar la solidaridad entre seres humanos y me queda claro que los nayaritas no se rajan, son valientes y trabajadores, pero sobre todo, los nayaritas sabemos ser unidos”.

La legisladora, acompañada de amigos y voluntarios, llegaba a la casa de algunos lugareños en las cuales tocaban y “preguntábamos: ¿cuántos viven aquí? y si decían cinco les dábamos para cinco; y a veces llegábamos a ciertos lugares como la plaza y les pedíamos que trajeran sus tuppers para nosotros no comprar desechables y así cuidar el medio ambiente”.

Mirtha Villalvazo platicó que contaban con un nutriólogo para que las asesorara en cuanto a la calidad nutricional, por lo que tenían variedad de comida como “pasta, pozole, carne con chile, frijoles, arroz… lo que se nos ocurría, pero siempre traía la proteína más a parte una barra, un yogur o un dulce; a veces dábamos desayuno pero normalmente nos enfocábamos a la comida. A las dos y media ya estábamos en el punto y eran ollas y eran filas de gente”.

A la par, se repartió leche líquida y pan dulce en la mayoría de las localidades de Bahía de Banderas; y se entregaron diversos alimentos en municipios de Amatlán de Cañas, Ahuacatlán y Xalisco.

Mientras que, preocupada por las necesidades de niñas y niños de preescolar y primaria, introdujo el kit “desayuno nutritivo”, de los cuales se entregaron aproximadamente seis mil para los pequeños habitantes de las diversas localidades de Bahía de Banderas.