Para muchos soldados es sumamente difícil tener que dejar atrás a los perros que los han acompañado durante sus jornadas de trabajo y misiones en otros países.
Y cómo no, si pasan a ser sus compañeros fieles, los más leales que siempre estarán dispuestos a entregarles cariño…
Bien lo sabe Sheldon Holland, quien tuvo un perro llamado Django en una de sus misiones en Kandahar, Afganistán y desarrolló una amistad tan especial, que le prometió que algún día vivirían juntos.
Él quería que su compañero jamás lo olvidara…
Pero al momento de dejar a Django, otras misiones lo esperaban… y no pudo volver a ver a su cachorro durante mucho tiempo. Sin embargo, tenía totalmente presente la promesa que le había hecho al perro.
Y dos años después, supo que era hora de cumplirla. Lo extrañaba demasiado y temía que Django se olvidara de él… así que sin pensarlo demasiado, fue a buscarlo.
El perro iba viajando a las perreras militares de Sudáfrica, pero cuando llegó, su dueño ya estaba allí esperándolo, listo para darle el hogar que en algún momento le había prometido.
Y cuando Django lo vio, lo reconoció de inmediato, e incluso comenzó a llorar de la emoción y solo quería que lo soltaran de su correa para correr a los brazos de su dueño.
Cuando por fin estuvieron juntos, nada más podía importar. Ambos se acariciaban y demostraban lo felices que estaban de volver a verse.
Y ahora nada ni nadie podrá separarlos.
Mira aquí el emotivo reencuentro:
Jamás encontrarán una amistad tan especial.
Source: UPSOCL