El trabajo infantil es una de las cosas más horrorosas del mundo. El abuso que se ejerce sobre personas tan pequeñas, es simplemente devastador. Esa escena que seguramente muchos han vivido: estás comiendo en algún restaurante o comida rápida, y un niño se te acerca a vender algún objeto o solo a pedir una moneda. A todos se nos parte el corazón.
Si bien en América Latina y el Caribe en los últimos años el trabajo infantil se ha reducido sustancialmente, 5,7 millones de ellos aún trabajan sin haber cumplido la edad mínima de empleo, según el Convenio núm. 182 de la OIT sobre las peores formas de trabajo infantil.
Y el caso de un niño ,descubierto en el año 2016, no ha dejado de conmover a toda la región. Es que se gana la vida en la calle y de una fascinante forma.
En un principio se pensó que el pequeño vivía en México, pero el periodista Javier López, Director de noticias de Cinco Radio en la región azteca, aclaró la información explicando que el niño era de Sucre, en Bolivia.
En las imágenes compartidas en Twitter, podemos observar a este niño, un poco sucio, con una tiza en las manos, haciendo dibujos muy bien logrados y hermosos. Lamentablemente, lo hace para poder costear su educación y alimentación, los transeúntes le dan un par de monedas por su arte.
Sus diseños son realmente fantásticos. Desde un Minion, también Stitch y dinosaurios. Lo que se te antoje, él podría dibujarlo.
¡Ya quisiera dibujar tan bien como él! Ojalá que su talento pueda seguir en un futuro y ahora, se dedique a estudiar y pasar sus días como un niño, y no trabajando.
Source: UPSOCL