En Chile, ha comenzado el recuento de votos sobre la propuesta de una nueva Constitución. La jornada de votación ha transcurrido sin incidentes y, a pesar de que el voto es obligatorio, se estima que la participación será inferior al 85% registrado en el plebiscito del año pasado.
Durante el día de votación, todo transcurrió sin problemas y, a pesar de que es obligatorio votar, se espera que la participación sea inferior al 85% registrado en el plebiscito del año pasado.
Este domingo, en Chile, se inició el recuento de votos sobre una propuesta de una nueva Constitución. La jornada estuvo marcada por la falta de energía y la falta de interés por parte de los ciudadanos hacia este segundo proceso constituyente.
Hoy, más de 15.4 millones de personas fueron convocadas para votar desde las 8:00 a.m. hasta las 6:00 p.m. hora local con el fin de aprobar o rechazar un documento creado por un grupo elegido por votación, el cual no logró llegar a un acuerdo debido a la mayoría de la derecha y la ultraderecha.
En septiembre de 2022, comenzó el segundo intento de crear una nueva constitución para reemplazar la impuesta en 1980 por la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990). En otro plebiscito, una mayoría aplastante rechazó un proyecto redactado por una convención de tendencia izquierdista que proponía cambios significativos en el modelo de país.
Antes de la veda electoral, se publicaron encuestas que indicaban que la ciudadanía volvería a votar en contra del texto. Sin embargo, los expertos afirman que los indecisos podrían tener un papel importante en el resultado final.
Mientras que los partidos políticos de derecha argumentan que esta propuesta aborda el problema de la inseguridad y pone fin a la incertidumbre institucional causada por las protestas masivas de 2019, los partidos de izquierda creen que el contenido del texto es "dogmático" y refuerza el modelo neoliberal establecido durante el régimen militar.
El Partido Republicano de ultraderecha, a pesar de estar en contra del cambio constitucional, ha obtenido la mayoría de escaños en el órgano encargado de redactar la nueva propuesta. Esta elección es muy importante para ellos, ya que un posible triunfo les daría un papel dominante dentro del espectro conservador, según los analistas.
La jornada de votación se llevó a cabo sin ningún contratiempo y, a pesar de que el voto es obligatorio, se estima que la participación será inferior al 85% que se registró en el plebiscito del año pasado.
De acuerdo con información oficial, un número superior a 242 mil individuos han justificado su ausencia en las elecciones con el fin de evitar sanciones económicas, lo cual representa el doble de cifras registradas el año pasado.
En caso de que el texto sea rechazado, la Constitución actual continuará en vigencia y el debate constitucional que comenzó después del estallido social de 2019, la mayor ola de protestas desde el retorno a la democracia en 1990, se cerrará al menos hasta que termine el mandato presidencial de Gabriel Boric en marzo de 2026.
El presidente Boric afirmó hoy que, sin importar el resultado, continuaremos enfocados en atender las necesidades prioritarias de la población.
El líder político, quien no ha participado en este proceso electoral, a diferencia de su participación en el referéndum del año pasado, emitió su voto en su ciudad natal de Punta Arenas, ubicada en el extremo sur del país, y regresó a Santiago horas después para continuar siguiendo el conteo de votos.
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