Corrupción | Pagó SCT 127 mdp por obras sin justificar, señala investigación
50 millones de pesos presuntamente fueron pagados sin licitación, de forma directa, y del resto, 77 millones de pesos, no existen documentos que justifiquen su entrega
Por: Miriam Castillo/MCCI
El 6 de marzo de 2017, con nueve meses de retraso, tres secretarios de Estado y el gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo, reinauguraron el puente de Barra Vieja, una construcción en la carretera de Pinotepa Nacional que cruza el Río Papagayo y une esa zona con el puerto de Acapulco.
El dueño de la empresa que recibió en 2014 el encargo de iniciar la reconstrucción del puente no apareció en la foto de inauguración. Cuatro meses antes había sido detenido en Estados Unidos, en donde confesó haber utilizado el sistema financiero de ese país para lavar dinero proveniente de sobornos y malversación de dinero público de México. Se trataba de Luis Carlos Castillo Cervantes, llamado El Rey de los Dragones.
Una investigación de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI) revela que Luis Carlos Castillo Cervantes recibió, a través de su empresa Logística de Calidad en la Construcción y Comercio, al menos 127 millones de pesos de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes para la construcción del puente Barra Vieja-Las Lomas. Casi la mitad de ese monto, 50 millones de pesos, fue pagado sin licitación, de forma directa, y en el resto, 77 millones de pesos, no existen documentos que justifiquen su entrega dos años después y justo un mes antes de ser capturado en territorio estadounidense.
Un total de 723 millones de pesos en diferentes obras habrían sido pagados mediante concursos simulados. En 2013 y 2014, a través de sus delegaciones estatales en Nuevo León y Tamaulipas, Comunicaciones y Transportes pagó a empresas ligadas a El Rey de los Dragones contratos por 79 millones de pesos. Documentos oficiales en poder de MCCI y Eje Central evidencian que las tres compañías que compitieron en esos convenios estaban directamente vinculadas a Castillo Cervantes, por lo que sería un concurso simulado que la Ley de Obras prohíbe.
Además, en licitaciones de la SCT restringidas a tres participantes, Castillo Cervantes ganó obra por 644 millones de pesos en San Luis Potosí, Colima y Zacatecas. Sin embargo, los documentos muestran que Castillo Cervantes colocó en la puja a dos de las tres empresas que participaron. Este mecanismo también lo prohíbe la legislación.
Luis Carlos Castillo Cervantes cuenta con una historia larga de trabajos con dependencias de gobierno federal y local. Casi todas se enumeran en adjudicaciones directas. El mecanismo empleado es la constitución de empresas, en total seis, en tres de ellas aparece directamente como propietario y en el resto sus familiares o representantes legales.