No hay duda que el empeño que ha puesto Bárbara de Regil por hacer de su cuerpo unos de los más esculturales —y envidiados— de la farándula mexicana ha cobrado sus frutos.
Esta disciplina representa para muchas mujeres una fuente de inspiración y ella se ha convertido en el modelo a seguir de millones de mexicanas que buscan tener algún día un físico como el suyo.
Pero luego de que la periodista Shanik Berman diera a conocer la exorbitante cantidad que recibe por una clase grupal muchos comenzaron a ver un poco abusivas sus prácticas, incluida la propia conductora.
“A Bárbara de Regil le pagan 600 mil pesos por dar clase a 5 mil personas en un zócalo o un auditorio, y las fans ilusas dan un dineral por asomarse a sus sesiones, creyendo que si toman una sola van a tener el cuerpo de ella, que lleva años haciendo cuatro horas diarias de ejercicio. En las clases se amontonan y se aplastan pensando: ‘Voy a acabar como ella’, escribió Berman en su columna en un importante diario.
Con información de TV Notas