A medida que una persona envejece, está más propensa a contraer problemas de salud, tanto físicos como mentales. El cuerpo y el cerebro se van deteriorando con el paso de los años, por eso, para atrasar o revertir lo más posible eso, es necesario que una persona se mantenga activa. Muchas veces sucede justo lo contrario: la mayoría de las personas jubilan alrededor de los 65 o 70 años, y en vez de practicar alguna otra actividad, se quedan en casa propiciando el desgaste de salud.
Pero un reciente estudio llevado a cabo por el Proyecto de Envejecimiento Sano de la Mujer en Australia, descubrió que una maravillosa solución serían los nietos. Éstos no solo traerían alegrías y dicha a sus abuelos, sino también serían de una gran ayuda para su salud.
Hoy en día los abuelos no son como las generaciones de antes. Un abuelo y/o abuela son personas jóvenes y activas aún; manejan, trabajan y son capaces perfectamente de cuidar a sus nietos. Y si tienen la fortuna de vivir cerca de sus nietos, el estudio recomienda que pasen el máximo tiempo posible con ellos y que los cuiden, pues los niños contribuirán a que sus abuelos vivan más tiempo.
La investigación científica, a partir del estudio de 340 abuelos, descubrió que los abuelos que cuidan a sus nietos tienen mucho menos probabilidad de enfermarse de Alzheimer o demencia senil, dos afecciones que aquejan al cerebro, perturbando la memoria y la percepción del tiempo-espacio.
Eso sí, como todo en la vida, nada en exceso es bueno. La idea es que un/a abuelo/a ayude en el cuidado de sus nietos, pero la tarea de criar es de los padres. Los abuelos que se encargaban de sus nietos por más de 5 días a la semana, tampoco obtuvieron buenos resultados.
Puede ser una tarea muy enriquecedora, pero desde luego también cansadora. Sobre todo para abuelos que tienen edad avanzada.
Source: UPSOCL