De acuerdo con medios locales, el pasado 31 de mayo Robert Jospeh Quick, quien ahora es considerado un héroe local, salió junto con su hija a pasear al perro que un amigo de la familia les había encargado.
En el trayecto, un hecho indeterminado originó que la mascota, de raza grande, se tornara violenta y se lanzara a atacar el rostro de la pequeña, por lo que de inmediato el padre intentó separar al perro de su hija, sin conseguirlo.
Ante su desesperación, Robert se lanzó contra el animal para liberar a la pequeña, lo que consiguió en el momento que el enorme can dirigió sus fauces al hombre para morderlo en la espalda, brazos y piernas, provocándole una enorme pérdida de sangre que pronto lo dejó inconsciente sobre el suelo, mientras el perro lo seguía atacando.
Cuando agentes de la policía llegaron al lugar encontraron «a un perro enorme atacando a un hombre que yacía sobre sus espaldas en el césped», reportaron los uniformados y explicaron que debido a la agresividad percibida, tuvieron que dispararle perro para que dejara de atacar al hombre.
Aunque Robert Jospeh fue trasladado de inmediato a un hospital cercano, dos horas más tarde murió por un paro cardíaco.
La pequeña, quien podría ser dada de alta en los próximos días, deberá recibir rehabilitación, por lo que la familia Quick emprendió una recolección de fondos para ese fin, así como para poder solventar los gastos funerarios, por medio de la plataforma GoFundMe.