(NOTICIAS YA).-Los niños pueden regresar a la escuela con las precauciones adecuadas contra la COVID-19, así afirman dos nuevos estudios de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) publicados el martes en el Informe Semanal de Morbilidad y Mortalidad de la agencia.

Muchos padres siguen preocupados por la seguridad de sus hijos en las escuelas, pero los expertos dicen que con las medidas de mitigación adecuadas, el aprendizaje en persona durante la pandemia es posible, según informó CNN.

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Los investigadores han enfatizado la importancia del aprendizaje en persona para el desarrollo de los estudiantes. Pero, por otro lado, las tasas de casos nuevos, hospitalización y muerte siguen siendo altas en todo el país.

En un esfuerzo por lograr el equilibrio adecuado, las escuelas han adoptado diversos enfoques que incluyen el aprendizaje en persona, el aprendizaje en línea y un híbrido de los dos.

En un artículo publicado en la Revista de la Asociación Médica Estadounidense, los investigadores señalaron que el tipo de propagación que se observa en oficinas abarrotadas e instalaciones de atención a largo plazo no se ha informado en las escuelas. Se ha producido transmisión en la escuela, pero los investigadores dijeron que hay poca evidencia de que contribuya de manera significativa a una mayor transmisión comunitaria.

«Comprometerse hoy con las políticas que previenen la transmisión del SARS-CoV-2 en las comunidades y las escuelas ayudará a garantizar el bienestar social y académico futuro de todos los estudiantes y su educación», escribieron los investigadores en el artículo de JAMA.

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Ambos estudios de la agencia demuestran que con las precauciones adecuadas, los niños pueden regresar a la escuela de manera segura.

Cubrebocas de triple capa y sin deportes de alto contacto

En el primer estudio, los investigadores analizaron datos de 17 escuelas K-12 en el condado rural de Wood, Wisconsin, que llevaron a cabo el aprendizaje en persona el otoño pasado:

• Encontraron tasas de casos de COVID-19 más bajas que en la comunidad en general y pocos casos de transmisión en la escuela.
• De 5.530 estudiantes y personal, 191 dieron positivo.
• Los investigadores encontraron que las tasas de casos de COVID-19 en las escuelas eran un 37% más bajas que en la comunidad circundante.
• El rastreo y la investigación de contactos determinaron que siete de esos 191 casos (3.7%, todos entre estudiantes) fueron contratados en la escuela. Tres de los siete estudiantes que dieron positivo eran de una clase de escuela primaria.

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Las escuelas no llevaron a cabo exámenes de rutina de coronavirus, pero implementaron medidas de mitigación:

• Por ejemplo, cada uno de los estudiantes recibió de tres a cinco máscaras de tela de doble o triple capa. Se requerían máscaras en las escuelas y, en todo el estado, más del 92% de los estudiantes de todos los grupos de edad las usaban.
• Grupos de 11 a 20 estudiantes del mismo grado se reunieron para las clases y el almuerzo en el interior, donde los estudiantes solían sentarse junto a la misma persona. Se pidió que no se mezclaran, y los investigadores no encontraron transmisión en la escuela entre diferentes grupos de alumnos.
• Se le dijo al personal que se enmascarara, la distancia social y limitara el tiempo en espacios interiores compartidos.
• Si un estudiante estaba fuera de la escuela con síntomas de COVID-19, a sus hermanos también se les decía que se quedaran en casa.
• Cuando un estudiante o miembro del personal dio positivo por el virus, los funcionarios de la escuela utilizaron entrevistas para identificar contactos cercanos: cualquier persona que estuviera a 6 pies de la persona durante más de 15 minutos en el transcurso de 24 horas.
• Se requirió que esos contactos cercanos se pusieran en cuarentena en casa, y si desarrollaban síntomas durante ese tiempo, los funcionarios investigaron si la causa fue la propagación en la escuela.

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El equipo dice que sus hallazgos sugieren que incluso con diferentes tasas de positividad en la comunidad, los estudiantes no necesariamente tienen un mayor riesgo de contraer el virus si asisten a clases en persona. De hecho, dicen que estar en un entorno monitoreado, como el aula, puede aumentar la adherencia a las medidas de salud pública.

Pero según otro informe de los CDC, las actividades extracurriculares, como los deportes de interior, pueden ser otra historia:

• Dos combates de lucha libre de la escuela secundaria de Florida se convirtieron en eventos súper-difusores en diciembre cuando 54 de los 130 asistentes (luchadores, entrenadores y árbitros) fueron evaluados para Covid-19, y 38 dieron positivo.
• Entre 91 contactos cercanos de personas infectadas, el 43% dio positivo por el virus.
• Un contacto, que tenía más de 50 años, murió.

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Y es que no es posible mantener la distancia física en el deporte de alto contacto, además la Academia Estadounidense de Pediatría (AAP) desaconseja el uso de cubrebocas mientras se lucha, porque representa un peligro de asfixia: «Los brotes entre los atletas que participan en deportes de alto contacto pueden afectar el aprendizaje en persona de todos los estudiantes y aumentar el riesgo de transmisión secundaria en la escuela y la comunidad con resultados potencialmente graves, incluida la muerte», escribieron los investigadores.