La diversidad de hongos en el planeta es amplia, abarca desde las especies con uso culinario como los champiñones, colmenillas y trufas, hasta aquellos de uso medicinal y de importancia cultural. A pesar de que en un principio fueron clasificados dentro del reino vegetal, actualmente los hongos forman el reino Fungi.
Entre otras diferencias con las plantas, los hongos no tienen clorofila que es un pigmento que capta la energía del sol para transformarla en energía química (proceso conocido como fotosíntesis), sino que éstos, obtienen energía de los organismos que descomponen o con los cuales forman asociaciones simbióticas, de ahí su importancia ecológica. Los hongos viven comúnmente en ambientes húmedos; en México podemos encontrar una mayor diversidad en los bosques de Oyamel seguido de Pino y Encino.
En palabras de Yolanda Arana Gabriel, doctora en Ciencias Agropecuarias y Recursos Naturales por la UAEMéx: las técnicas moleculares son una herramienta para determinar con mayor exactitud las especies de hongos, no solamente por taxonomía clásica (caracteres morfológicos y microscópicos).
Arana Gabriel cuenta con la publicación del libro Hongos silvestres comestibles: un recurso forestal no maderable del Nevado de Toluca, en el cual se determinaron 77 especies, entre ellas Flammulina mexicana. Flammulina mexicana es conocida comúnmente como hongo de jara y es recolectada para autoconsumo; es endémica de las montañas altas y reportada, por primera vez, en dicha publicación para el Estado de México.
A pesar de que F. mexicana tiene una población restringida y es endémica de México su cultivo a nivel de laboratorio se la logrado con éxito. Además, tiene parentesco con F. velutipes especie que ocupa el quinto lugar en términos de producción de hongos comestibles cultivados a nivel mundial.
Asimismo, otras especies fueron reportadas como Lyophyllum shimeji que, vigentemente ha sido objeto de estudio para determinar una posible nueva especie mexicana. La doctora Yolanda Arana comenta que es una de las especies de mayor importancia cultural para las personas que se dedican a la recolecta de hongos, su estudio es una alternativa para diversificar el cultivo de especies que ya se conocen.
En el laboratorio de Micología de la UAEMéx, Arana Gabriel lleva a cabo investigaciones relacionadas con taxonomía y biotecnología de producción de hongos comestibles (entre ellos Lyophyllum spp. y Flammulina mexicana) a partir de recursos nativos; involucrando aspectos como su recolecta, caracterización, identificación, conservación de germoplasma, cultivo in vitro, identificación de tipos de sustratos y de condiciones ambientales adecuadas para su fructificación que lleva a la descripción de sus ciclos de cultivo. Actualmente es profesora de asignatura en la Licenciatura de Biología en la UAEMéx.