Yamcha fue, al lado de Gokú, Krillin, Bulma, Woolong y Pu’er, uno de los protagonista de Dragon Ball y el primer rival de Kakaroto. Al principio de la historia, Yamcha fue presentado como el “Lobo Solitario, un bandido del desierto, arrogante y poco empático, que cambió de forma de vida tras conocer a Gokú.
Durante toda la primera parte de Dragon Ball, Yamcha acompaña a Gokú en sus aventuras. Además, tuvo una participación destacada en el Torneo de las Artes Marciales y logró enamorar a Bulma, aunque ya sabemos cómo terminó eso.
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No obstante, cuando se lanzó Dragon Ball Z, Yamcha fue perdiendo protagonismo, aunque hizo frente a poderosos enemigos, como Nappa y el mismo Vegeta. Desafortunadamente, la escala de poder de Dragon Ball Z incrementó tan repentinamente, lo que hizo que casi todos los personajes del pasado fueron poco a poco relegados.
Pero nadie fue más afectado por esto que Yamcha, cuyas participaciones se limitaron a ser derrotado por los villanos, demostrando que tan poderosos eran.
No fue sino hasta la saga de Moro en Dragon Ball Super, que Akira Toriyama y Toyotaro le dieron la oportunidad de brillar una vez más, aunque sea por unos momentos.
Hace tiempo, Akira Toriyama reveló qué imaginó una historia en solitario para Yamcha. De acuerdo con el “sensei”, la historia del bandido del desierto comenzaría diez años después del final Dragon Ball Z y veríamos cómo Yamcha aún tiene problemas para socializar con las mujeres, por lo que decidiría empezar a trabajar como guardaespaldas al lado de Pu’er y de vez en cuando ayudaría a Ten Shin Han y Chaoz en su granja.
Quizá te estés preguntando cómo podría Yamcha proteger a alguien, pero recordemos que, aunque no es el hombre más poderoso del planeta, es uno de los arte marcialistas más habilidosos de la especie humana, lo que lo hace más fuerte que una persona promedio.