“Di no a las dietas extremistas o de moda y acude al nutriólogo”, advirtió Mariana Cardona Mejía, catedrática de la Facultad de Enfermería y Nutriología de la Universidad Autónoma de Chihuahua, quien, además, recalcó que no hay camino fácil para mantener un estado físico y nutricional optimo, eso requiere de trabajo constante de cada persona.
De acuerdo con la maestra en Ciencias de la Nutrición únicamente es posible llevar un estilo de vida saludable cuando las personas reciben la guía de especialista capacitados y no por influencers, coaches y bloggers que no tienen la preparación necesaria.
Mariana Cardona Mejía reiteró la importancia de no dejarse llevar por la oleada de consejos y productos que circulan en redes sociales y que prometen ayuda casi milagrosa para controlar el peso, como es el caso de dietas extremas, pastillas, suplementos, malteadas, cremas, vendase inyecciones.
Otras opciones del tipo, continuó, son los tratamientos con aparatos supuestamente reductores de peso que prometen resultados rápidos y extraordinarios sin ningún esfuerzo físico, las cuales van en contra de las normas oficiales mexicanas y dañan la salud.
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Cardona Mejía hizo hincapié en que atender los problemas de salud, en este caso, los relacionados con el peso, requiere de una preparación especializada, de inicio con una licenciatura, y posteriormente con posgrados. Lo anterior debido a que se trata de un área que requiere de actualización constante.
“Seamos selectivos al recibir consejos relacionados con la nutrición y alimentación correcta. Es importante aprender a discernir entre la información que cuenta con sustento científico y aquella que tiene la finalidad de vender o favorecer alguna corriente de moda. Confía tu salud y estado nutricio en el nutriólogo”, enfatizó.
Mariana Cardona Mejía recalcó que varias décadas de estudio refieren que las enfermedades con mayor prevalencia a nivel global están directamente relacionadas con los hábitos alimenticios. Aunque es posible que exista una predisposición genética, el estilo de vida que lleva cada persona es la causa del desarrollo de enfermedades no transmisibles (como la obesidad y la diabetes).
En este contexto reiteró la importancia de adoptar costumbres saludables de la mano de un nutriólogo profesional con la debida capacitación para recomendar alimentación correcta al individuo en cada etapa de su vida, incluso a aquellos que padecen alguna patología.
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La experta recalcó que, tras evaluar el estado del paciente, el profesional de la nutrición diseñará una estrategia de intervención con objetivos individualizados, considerando el ambiente laboral familiar y social. También promoverá un cambio real en las costumbres de cada individuo a fin de que éste sea permanente.
