A pesar de que el home office ha sido de gran ayuda para miles de empresas y trabajadores en todo el mundo tras la aparición del COVID-19, conforme se ha ido mermando la curva de contagios, las organizaciones han tenido que repensar sus dinámicas, espacios y medidas de higiene para garantizar la seguridad de todos.

La nueva normalidad también supone un cambio en los espacios de trabajo, ya que aunque en algunas ciudades del país los semáforos epidemiológicos son poco alarmantes, lo cierto es que las organizaciones de la salud recomiendan ‘no bajar la guardia’, ya que es probable que se tengan un repunte de casos si se relajan las medidas sanitarias.

Incluso la Organización Mundial de la Salud (OMS), en colaboración con la Organización Panamericana de la Salud, cuentan con un protocolo para preparar los espacios de trabajo frente a la amenaza del virus y advierten que aunque “las autoridades de salud pública de todo el mundo están adoptando medidas para contener el brote de COVID-19, no puede darse por sentado el éxito a largo plazo. Todos los sectores de la sociedad, incluidas las empresas y los empleadores, deben asumir sus responsabilidades si queremos detener la propagación de la enfermedad”.

Respecto a cuándo regresaremos a las oficinas, Andrea Rojas, Head de Recursos Humanos en Runa, plataforma de nómina y gestión de Recursos Humanos, señala que no existe un día específico, ya que “dependerá en gran medida del control de la pandemia, de las restricciones sanitarias de cada región y de la capacidad de cada empresa para gestionar un nuevo espacio de trabajo con nuevas políticas y dinámicas laborales”.

A pesar de que no hay una fecha específica para el retorno general a los centros de trabajo, en algunas ciudades se han registrado reaperturas graduales, con lo que miles de empresas están enfocando sus esfuerzos para renovarse y recibir nuevamente a sus colaboradores.

“Durante la nueva normalidad hay tres factores que deben cuidarse para tener un regreso controlado, amigable y seguro a las oficinas: preservar las medidas de higiene, considerar un cambio en los espacios físicos y una nueva organización de trabajo, puesto que algunas labores pueden seguirse realizando de manera remota, lo cual es un gran beneficio, ya que permite seguir cuidando de la salud de los colaboradores; sin embargo, aquellos trabajos que sí requieren presencia física deben adaptarse a una nueva dinámica que incluya horarios escalonados o reducción de jornada laboral”, agrega la Head de Runa.

Medidas de salud

La preservación de las medidas de salud seguirá en la lista de prioridades durante el regreso a las oficinas.  De acuerdo con el estudio El futuro del trabajo en América Latina, realizado por Runa, las empresas de la región han implementado 4 protocolos de higiene, los cuales seguirán aplicando durante la nueva normalidad:

• Limpieza y desinfección de áreas comunes
• Toma de temperatura al ingreso
• Áreas de desinfección y aislamiento
• Capacitación básica de higiene

Áreas de trabajo

Respecto al espacio físico de trabajo, según este mismo estudio, el 76% de las empresas en América Latina han modificado sus oficinas a partir de la pandemia, para hacer de éstas un espacio más seguro e higiénico acorde a las recomendaciones sanitarias de la nueva normalidad. Las principales transformaciones fueron:

• Cambios en la distribución. El 6% de las empresas dijo que cambió la forma en la que se organizan y distribuyen los empleados dentro del centro de trabajo. Algunas organizaciones optaron por formar equipos más pequeños al alternar las labores de trabajo presencial y remoto.
• Nuevas estructuras. Las estructuras de las oficinas también han cambiado para el 41% de las empresas. Por ejemplo, algunas optaron por mejorar el acceso al aire fresco y colocar más ventanas, la instalación de divisores de áreas o la construcción de terrazas y balcones.
• Tamaño de las instalaciones. El 24% de las organizaciones latinoamericanas cambiaron el tamaño de las oficinas, ya sea por otras más pequeñas para evitar la aglomeración de personas en un mismo espacio o incluso algunas cambiaron su sede para estar más cerca del hogar de sus empleados y que así estos realicen viajes más cortos en transporte público.

Dinámicas de trabajo

Todo indica que con la llegada de la nueva normalidad no desaparecerá el home office, pero dependiendo de las necesidades de cada empresa esta forma de trabajo podrá combinarse con días laborales presenciales.

Runa refiere que entre las dinámicas más destacadas de las empresas para el regreso de oficinas están:

• Días de trabajo alternados. El 55% de las empresas de América Latina han implementado días de trabajo alternados para preparar a sus equipos de trabajo para el regreso a la oficinas.  Algunas han diseñado sistemas de tres días de home office por dos presenciales, o incluso hasta dinámicas de una semana presencial por una de home office.
• Horarios escalonados. Esta práctica también ha sido popular, ya que el 47% de las empresas dijo llevarla a cabo. La idea es concentrar el menor número de empleados en la oficina al establecer diferentes horarios y con base en ellos armar los equipos de trabajo.
• Reducción de la jornada laboral. El 19% de las empresas ha implementando la reducción de jornadas laborales. Por ejemplo, dividiendo al equipo de trabajo en dos turnos, con lo que se reduce la cantidad de personas en la oficina..
• Control de horarios para la comida. El 19% de las empresas han establecido horarios para la comida, para evitar que se congregue una gran cantidad de empleados en las áreas de alimentos, esta medida está acompañada de la desinfección constante de dichos espacios.

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