Incluso estando conscientes de que no existe una fórmula única y milagrosa para criar buenos hijos, padres y madres normalmente recorren las guías, manuales o consejos de parientes mayores para ayudarse en esa gratificante pero difícil tarea.
El tema es tan actual y relevante que hasta los científicos de la prestigiosa Universidad de Harvard estudiaron el tema y formularon una lista con 6 ítems considerados esenciales para el buen desarrollo de un niño.
6 consejos de Harvard para criar bien a los hijos
- Pasa más tiempo con tu hijo conversando, jugando e intercambiando enseñanzas. Esta actitud hace que los niños se sientan amados por recibir atención y mostrar la importancia de cuidar al prójimo.
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Muchos adultos pueden encontrar que los niños, por ser pequeños, no son capaces de comprender ciertas palabras o declaraciones. Pero los científicos afirman que es importante para los padres decir de forma clara y en voz alta lo cuánto aman a sus hijos. O sea, no basta solamente con amar. Es preciso demostrar y pronunciar el afecto.
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Evita tomar todas las decisiones por tu hijo y ayúdalo a ser responsable por sus actos y elecciones. Es importante que los niños entiendan que las elecciones que ellos hacen en la vida tienen consecuencias e impacto directo sobre las personas y la sociedad en su conjunto.
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Desarrolla una rutina de agradecimiento y ayuda. O sea, por medio de las actitudes, demuestra a tus hijos la importancia de ser generoso, los beneficios de aprender a perdonar y la necesidad de practicar la compasión, la empatía. Y cuando el niño haga lo correcto, no tengas miedo de elogiarlo.
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Esté atento a las posibles demostraciones de emociones destructivas de los niños. Sentimientos negativos como vergüenza, envidia o rabia son comunes durante el desarrollo del niño, por lo que el papel de los padres y madres, como líderes, es enseñarles a controlar esas emociones.
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Una vez que tu hijo ya se siente amado y respetado dentro de casa, ayúdale en el proceso de expansión de sus horizontes, enseñando que él también debe escuchar, ayudar y ser bueno con las personas fuera del ciclo familiar. Este comportamiento hace que el niño se coloque en el lugar de otros, tenga empatía, mejorando y conviviendo en sociedad.