Nueva Orleans, EUA, 25 Oct (Notimex).- El centro DeMarcus Cousins lamentó haber sido leal a Kings de Sacramento y permecer tiempo de más, a pesar de la oportunidad que se le presentó en 2015 de salir, pero ahora es feliz con Pelicans de Nueva Orleans.
A mediados de la temporada pasada decidió la directiva de Kings mandar a Cousins a Pelicans durante el periodo de intercambios, lo cual agarró de sorpresa al jugador y a todo el ambiente del baloncesto de la Asociación Nacional de Baloncesto (NBA).
“Lo que más lamento es por qué no me fui cuando tuve la oportunidad. Tuve la posibilidad, pero peleé por el equipo. Debería haberme ido cuando tuve la oportunidad, porque me dieron señales de lo que sucedería”, declaró el atleta de 2.11 metros de estatura a “ESPN”.
Sacramento adquirió a DeMarcus en el quinto turno de la primera ronda del Draft de 2010 y durante seis temporadas y media fue la imagen de Kings, asistió a tres Juegos de Estrellas, pero nunca calificó con la quinteta a los playoffs.
Al paso del tiempo ve que la primera señal que le mandó la directiva para irse fue en el verano de 2015, cuando contrató al nuevo entrenador George Karl, pero no, decidió quedarse.
“Quería darle una oportunidad. Mis representantes me dijeron que no debería quedarme. Pero, ya sabes, supongo que soy obstinado o leal. Quería hacer que las cosas funcionaran”, expresó.
El año pasado entendió de lo que se trataba, “es un negocio. Me culpo por ponerme en ese punto. ¿Cómo vas a ser leal a algo que no ha sido leal a ningún jugador? ¡Fui un tonto!”.
Con Sacramento participó 491 juegos, 469 de titular, 0.459 de porcentaje de efectividad en tiros de campo y 21.2 puntos de promedio por encuentro, y en Pelicans lleva 21 partidos, todos de titular, 0.457 de efectividad y 25.6 puntos de promedio por encuentro.
Este jueves visitará por primera vez a Kings de Sacramento y lo hará con 31 puntos de promedio en lo que va de la temporada 2017-2018 y para nada siente que será un “juego de venganza”.
“Estoy emocionado de jugar frente a los fanáticos y ver su reacción. Pero en lo que respecta a ser como un juego de venganza … ya lo superé. Estoy en un buen lugar, estoy feliz en donde estoy, en Pelicans”, concluyó el campeón del mundo España 2014 y olímpico Río 2016.
