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En el zoológico de Cali, los animales fueron sorprendidos con un festín navideño que despertó su instinto y los hizo utilizar sus garras, plumas, picos y colmillos.
Los animales que viven en el zoológico de Cali fueron obsequiados con un festín de Navidad que les permitió utilizar sus habilidades naturales como garras, plumas, picos y colmillos.
Hoy, en el zoológico de Cali, ubicado en el suroeste de Colombia, los animales tuvieron una agradable sorpresa para celebrar la Navidad. Se les brindó un festín que les permitió utilizar sus habilidades naturales, como garras, plumas, picos y colmillos.
Los encargados de cuidar el bienestar de los animales en el zoológico organizaron una actividad en la que se les dio a las diferentes especies alimentos especiales que están incluidos en su dieta, con el objetivo de estimular sus instintos.
Dantas, monos araña, suricatos y otros grupos de animales disfrutaron de comidas nutritivas y ricas en proteínas, cuidadosamente preparadas por expertos en alimentación animal que dedicaron mucho tiempo en sorprenderlos.
Según Laura Cubides Jiménez, una experta en zootecnia y coordinadora del bienestar animal del zoológico, estas actividades son beneficiosas para los animales, ya que les brindan la oportunidad de experimentar cosas nuevas de forma segura en su propio entorno.
Según Cubides, nuestros expertos en alimentación animal se encargan de preparar comidas con ingredientes que no siempre forman parte de la dieta de los animales, pero que les encantan. De esta manera, los animales disfrutan de una jornada segura en la que pueden despertar su curiosidad.
Los voluntarios del zoológico dedicaron tres semanas a pintar figuras de Papá Noel, árboles de Navidad y otros diseños para animar a las diferentes especies. El banquete fue entregado en envases de colores hechos con material reciclado y seguro.
Los leones disfrutaron de una comida con presas de pollo, mientras que a las águilas se les ofrecieron ratones. La osa de anteojos tuvo una torta con sus cereales preferidos, los lémures disfrutaron de helados de frutas y los venados se alimentaron con semillas y pasto fresco.
Expertos se encargaron minuciosamente de preparar los alimentos para los animales del zoológico, asegurándose de que cada ingrediente estuviera equilibrado. Esto permitió que los animales disfrutaran de comidas deliciosas como insectos, uvas, maní, esencias y otros elementos que contribuyeron a su bienestar. Mónica Vega, voluntaria del área de Nutrición del zoológico, confirmó que cada preparación fue garantizada por estos expertos.
Algunos de los animales tuvieron sus regalos ocultos para que pudieran encontrarlos utilizando su sentido del olfato y despertar su instinto de exploración en un entorno similar a su hábitat natural.
Los visitantes que estuvieron en el lugar también disfrutaron del espectáculo, acompañados por guías que les explicaron la importancia de proteger los recursos naturales y garantizar la supervivencia de todas las especies.
Es maravilloso observar cómo los animales también pueden disfrutar de esta temporada navideña, pero es aún más conmovedor cuando nos enseñan que si no asumimos nuestra responsabilidad como seres humanos, toda esa belleza puede desaparecer. Para Juliana Valencia, visitante del zoológico, el mejor regalo de Navidad será proteger su hábitat.
Los encargados del zoológico han pedido que esta actividad navideña se convierta en una oportunidad para tomar acción y disfrutar de la vida en todas sus manifestaciones.
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