TEHERÁN (AP) — La negativa del presidente estadounidense Donald Trump a certificar el acuerdo nuclear con Irán ha provocado una nueva guerra de palabras entre Teherán y Washington.
El discurso de Trump el viernes alimentó la desconfianza creciente hacia Estados Unidos y el sentimiento nacionalista de los iraníes.
El discurso sirvió para unificar a los iraníes de todo el espectro político, incluso a los que intentan debilitar desde adentro el régimen clerical.
El discurso probablemente fortalecerá al sector intransigente, el que insiste que Estados Unidos sigue siendo el “Gran Satán” denunciado por la revolución de 1979 que creó la República Islámica.