Oaxaca.- Un juez federal ordenó el traslado de Heriberto Margariño, líder regional de la sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores del Educación (SNTE), adherido a la CNTE, del penal de mediana seguridad de Miahuatlán a la cárcel regional de Tehuantepec.

A Margariño se le acusa de robo, lesiones calificadas, motín, ataques a las vías generales de comunicación, toma de instalaciones estratégicas de PEMEX, saqueo, y vandalismo.

Niegan amparo a Rubén Nuñez

La defensa de Rubén Núñez, líder de la sección 22, recriminó que se esté retrasando su liberación por parte de la justicia federal, aún cuando ya se han ganado los tres amparos para que obtenga su libertad bajo fianza.

El secretario de Asuntos Jurídicos de la gremial, Jerónimo Martínez Ambrosio, denunció que el juez federal se niega a dejar bajo su tutela al implicado, lo que daña el proceso de promociones de amparo que se han presentado.

“Vemos proceso dilatorios en la justicia federal para seguir reprimiendo a nuestros líderes, principalmente por que las imputaciones que han fincado se han ido cayendo por falta de elementos”.

Afirmó que en la mesa jurídica con la Secretaría de Gobernación (Segob), la Comisión Política de la sección 22 está demandando la liberación de 20 presos políticos y de dos de sus dirigentes encarcelados.

Martínez Ambrosio acusó al gobierno federal y a la Procuraduría General de la República (PGR) de utilizar los instrumentos de justicia, como ariete para reprimir movimientos sociales.

Dijo que se han encontrando evidencias de que los procesos penales contra los líderes de la sección 22 fueron soportados con pruebas falsas.

Añadió que los expedientes penales están siendo amañados por jueces de consigna, que tienen el mandato de criminalizar la protesta social.

“Están tratando a nuestros líderes como si fueran narcotraficantes, cuando su único delito es luchar por que en México se privilegie una educación gratuita”.

Afirmó que al violentar el debido proceso, los implicados deben obtener su libertad incondicional.