Si alguna vez tuviste un hámster, sabrás que estos pequeños suelen esconderse en lugares que jamás imaginaste. Dentro de las paredes, debajo del sofá, en el armario, donde sea. Si fuiste o eres dueño de uno, sabes lo que es tener el miedo de no encontrarlo.

Entonces viene la desesperación, buscando entre la ropa, bajo los muebles, en el baño y en toda la casa. Cuando ya estás a punto de rendirte, aparece, como si nada, tu pequeño roedor caminando y directo a comer zanahorias. Lo miras con desaprobación, pero no puedes enojarte con él. 

Pero quien sí probablemente pudo enojarse fue esta mujer, que luego de sentir ruidos extraños dentro de su auto, tuvo que acudir al servicio mecánico. Preocupada, no sabía qué podría estar provocando aquellos sonidos y decidió recurrir a expertos.

Tyne y Wear son mecánicos en Sunderland y recibieron a la mujer. Luego de examinar el vehículo y una vez que identificaron el lugar de donde provenían los ruidos, supieron que algo estaba atrapado. Sin pensarlo, comenzaron a desarmar la pieza del automóvil.

Una vez que lograron sacar el arco de la rueda, adivinen qué salió desde su interior: ¡nada más ni nada menos que Mila, la pequeña hámster de la familia!

Nadie pudo haber adivinado que desde el interior del auto saldría un adorable roedor. “¡Se supone que debería estar en casa, hoy la he limpiado!”, dijo su dueña.

Sin embargo, Mila no se preocupó. Al momento de ser rescatada, sólo mordió el destornillador del mecánico.

Lo bueno de la historia es que Mila salió sana y salva. Creemos que todos en su familia están contentos de que esté ilesa, sin embargo, no sabemos si la felicidad durará cuando deban pagar el valor del servicio mecánico. ¡Ojalá no se lo descuenten de sus zanahorias!

Source: UPSOCL