Pedro Sánchez se enfrenta a una difícil negociación para formar gobierno en España. El rey Felipe VI le ha dado la oportunidad de mantener su cargo, pero tiene como fecha límite el 27 de noviembre.

El monarca Felipe VI le dio a Pedro Sánchez la oportunidad de renovar su puesto, pero tiene como fecha límite el 27 de noviembre.

Pedro Sánchez, el líder del partido socialista y actual presidente en funciones de España, se enfrenta a un desafiante proceso de negociación, especialmente con los partidos nacionalistas e independentistas, para lograr formar un nuevo gobierno en el país. Esta tarea comenzó oficialmente el martes, cuando el rey Felipe VI lo nombró como candidato.

Después de que el líder conservador, Alberto Núñez Feijóo, no lograra ser investido la semana pasada, el monarca español se reunió con los representantes de los partidos políticos parlamentarios, como establece la Constitución. Durante la reunión, el monarca ofreció a Sánchez la oportunidad de mantener su cargo, pero deberá hacerlo antes del 27 de noviembre. Si no lo consigue, se convocarán nuevas elecciones.

La presidenta del Congreso de España, Francina Armengol, anunció que Felipe VI ha tomado la decisión de intentar formar Gobierno en base a la disposición del líder socialista, según un comunicado de la Casa Real.

A partir de ahora, Sánchez se enfrenta a la tarea de negociar con los grupos políticos más afines a los socialistas, como la coalición de izquierda Sumar, con el objetivo de formar un gobierno progresista, lo cual se espera que sea relativamente fácil. Sin embargo, también deberá negociar con los partidos regionalistas, nacionalistas e independentistas, quienes no le garantizan su apoyo.

El Partido Socialista tiene el respaldo de sus 121 diputados, a los que se sumarían los 31 de la formación de izquierdas Sumar y probablemente los 6 diputados independentistas vascos de EH Bildu y los 5 diputados nacionalistas vascos del PNV.

Actualmente, se está llevando a cabo una negociación para obtener los votos de los partidos independentistas catalanes de ERC y Junts, los cuales tienen 7 parlamentarios cada uno.

Los partidos independentistas catalanes están solicitando a Sánchez que apruebe una ley de amnistía para los políticos condenados por el intento de secesión de Cataluña en octubre de 2017, y que avance en el reconocimiento del derecho de autodeterminación para poder llevar a cabo un referéndum de independencia.

Además, el BNG, un partido nacionalista gallego, cuyo único diputado votó en contra de la investidura de Feijóo, también le advirtió recientemente a Sánchez que su apoyo no está asegurado.

Durante una conferencia de prensa después de ser nombrado candidato, Sánchez dejó claro que se opone completamente a la idea de llevar a cabo un referéndum de autodeterminación en Cataluña.

El líder del gobierno en funciones de España declaró que es hora de mostrar “generosidad”, “compromiso”, “liderazgo” y “política” para resolver el “problema político” en esa región del país. Además, aseguró que una vez que hable con todos los grupos parlamentarios, expondrá su postura respecto a sus demandas.

Sánchez también respaldó la decisión que tomó el año pasado con respecto a los indultos a los condenados por el intento de secesión en Cataluña en octubre de 2017. Según él, esta decisión fue difícil, pero ahora puede confirmar que fue correcta y se tomó pensando en el bienestar general.

Aunque no se menciona directamente una ley de amnistía, se admitió que se están llevando a cabo conversaciones con los diferentes grupos y fuerzas independentistas.

No tengo ninguna necesidad de ocultarlo, expresó, antes de mencionar que las acciones serán sutiles y continuas, pero los acuerdos, que espera que ocurran, serán de conocimiento público y contarán con la aprobación del Congreso e incluso del Tribunal Constitucional.

Después de expresar su emoción y agradecimiento por el voto de confianza de los ciudadanos y la designación del rey, hizo hincapié en que su investidura no será algo trivial. Afirmó que no quiere que sea una ceremonia simbólica, sino que será auténtica. Además, aseguró que no quiere hacer perder el tiempo a los españoles.

El presidente Sánchez tiene la intención de reunirse con los líderes de todos los partidos políticos en España, incluso con Feijóo del Partido Popular, a menos que sea rechazado. Sin embargo, dejó claro que no tiene intención de reunirse con el partido ultraderechista Vox.

Además, rechazó la posibilidad de tomarse una foto con Carles Puigdemont, quien es el líder del partido JuntsxCat y cuya colaboración sería crucial para su nombramiento.

Puigdemont está huyendo de la Justicia española en Bélgica, después del referéndum independentista ilegal que tuvo lugar en Cataluña el 1 de octubre.

En la primera votación, Sánchez necesita obtener la mayoría absoluta, que son 176 escaños. Si no logra esto, habrá una segunda votación dentro de 48 horas en la que solo necesitaría la mayoría simple.

Si el intento no tiene éxito, se acabaría con el mandato de las Cortes y se celebrarían nuevamente las elecciones generales el 14 de enero del siguiente año.

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