El empresario sudafricano, Elon Musk, anunció en Twitter que Tesla deja de aceptar bitcoin como forma de pago para comprar sus vehículos eléctricos porsu supuesto impacto medioambiental.
“Estamos preocupados por el rápido incremento en el uso de energía fósil para el minado y las transacciones de bitcoin, especialmente el carbón”, señaló en un comunicado publicado en Twitter.
“Las criptomonedas son una buena idea… pero no puede ser a expensas de un gran coste para el medio ambiente”, señaló Musk, retractándose de comentarios anteriores.
Y es que sus declaraciones se producen menos de dos meses después de que Tesla anunciara que aceptaría bitcoin, lo que entonces desató las críticas de algunos ambientalistas e inversores.
En febrero, el fabricante de vehículos eléctricos además reveló que había comprado mil 500 millones de dólares en bitcoin, la principal criptomoneda del mercado, lo que a un precio récord.
Los analistas del mercado ven la decisión como un intento de Tesla de calmar las preocupaciones de inversores que están centrados en el cambio climático y la sostenibilidad.
Ethereum, la criptodivisa que crece en el mercado de criptomonedas
“Los criterios medioambientales, sociales y de gobernanza empresarial (ESG, por sus siglas en inglés) son ahora una motivación principal para muchos inversores. Tesla, siendo una empresa enfocada en energías limpias, puede que quiera trabajar mejor en el área medioambiental de los ESG”, señaló Julia Lee de Burman Invest.
“No obstante, alguien cínico podría sugerir que esto es simplemente otra jugada de Elon Musk para influir en el mercado de las criptomonedas, como lo ha hecho en otras tantas ocasiones”, añadió.
El mes pasado, Tesla anunció que sus ganancias en los primeros tres meses del año ascendieron a 438 millones de dólares, 16 millones más que el año anterior, gracias a que había vendido bitcoin y a los créditos de regulación ambiental.
Musk ha sido uno de los defensores de las criptomonedas de más alto perfil, tuiteando a menudo sobre el bitcoin y dogecoin. Los comentarios de Musk en Twitter en meses recientes ayudaron a convertir dogecoin, que arrancó como una suerte de broma de redes sociales, en la cuarta mayor criptomoneda del mundo.
La situación de las criptomonedas con el medio ambiente se da por que el bitcoin es creado por mineros que utilizan computadoras de gran potencia para competir entre ellos y resolver puzzles matemáticos complejos. Siendo este un proceso que requiere de una gran fuente de energía, que puede recaer en electricidad generada por combustibles fósiles, particularmente, carbón.
El dominio de los mineros de bitcoin chinos y la falta de motivación para cambiar de combustibles fósiles baratos a otras formas de energía renovable más caras se traduce en que hay pocas soluciones a las preocupaciones sobre las repercusiones para el medioambiente del bitcoin.
China representa más del 75 por ciento del minado de bitcoin en el mundo, según un estudio reciente, que concluyó que la huella de carbón de la criptomoneda es tan grande como la de diez grandes ciudades del país asiático.
Eso se debe al hecho de que esos mineros de bitcoin tienden a utilizar electricidad producida por combustibles fósiles durante gran parte del año, cambiando tan solo a energías renovables (en general, energía hidráulica) durante los meses de lluvia estivales.
Sin embargo, los defensores del bitcoin subrayan que elsistema financiero tradicional, con sus millones de trabajadores y computadoras en oficinas con aire acondicionado, también utilizan grandes cantidades de electricidad, que comúnmente provienen de combustibles fósiles.
Tesla & Bitcoin pic.twitter.com/YSswJmVZhP
— Elon Musk (@elonmusk) May 12, 2021
BBC.