La artista chilena, que se retiró del conservatorio para cantar en los bares, dice que se demoró en venir a Colombia porque cuando empezó no tenía suficientes recursos económicos.
“Antes de ti” dice: “estaría sola y triste como esta canción”, ¿esa es la manera en la que definiría este tema?
Sí, pero la canción no es triste, es más bien melancólica, pero en realidad la letra es bonita, aunque tiene algo de triste también, porque es triste pensar que antes toda su existencia (hablo en tercera persona refiriéndome al personaje que canta) no fue feliz, y ahora lo es porque conoció a esta persona. Es triste decir que toda tu existencia estuvo vacía.
¿Por qué escogió esta canción como sencillo?
Esta canción la escribí un día en medio de la gira y me gustó mucho la melodía, quise tocarla en un concierto y le dije a la banda “vamos a montarla”. Ensayamos, y cuando la tocamos, la gente enloqueció, les encantó. Me gusta cantarla, me gusta tocarla por lo romántica, y por eso me pareció muy bonito compartirla, hacerla sencillo.
Lleva la melodía de la canción por diferentes atmósferas hasta llegar un poco a la balada…
Sí, definitivamente es una baladota, como las de Juan Gabriel, Camilo Sesto, José José, de ese tipo de balada que es música muy bella que ya está bastante olvidada. Ya la gente no hace esas baladas románticas, pienso que se ha perdido un poco esa manera de hacer música. Yo soy muy romántica, a la antigua con la música y me quiero quedar con eso, me aferro a ese tipo de canciones.
¿Desde que la estaba creando sabía que ese iba a ser el ritmo?
Sí, esta canción en particular la oí así. Cuando la estaba haciendo llamé al director de mi banda y le dije que quería que la canción empezara con unas cuerdas, yo ya me la había imaginado toda así. Hay otras canciones que no, que las batallo más, porque son solo con guitarra y luego cuando llega el momento de hacer un arreglo siento que están como un poco forzadas… depende mucho de la canción.
¿Para usted el hecho de componer es un proceso doloroso?
Es tranquilo y de disfrute, completamente. Cuando estoy muy triste no escribo canciones, no puedo, me cierro, veo series, me emborracho o algo así, pero no me pongo creativa. En cambio, cuando estoy bien hago canciones y es algo que disfruto mucho. Si paso una etapa compleja emocionalmente y la supero, hago una canción. No es para nada un proceso doloroso. He llorado mucho haciendo canciones, pero hay un gozo ahí.
Empezó a formarse en un conservatorio y lo abandonó para cantar en los bares, ¿cómo fue ese tránsito?
Era muy pequeña e inmadura. Nunca tuve disciplina en mi familia, siempre me dejaron muy libre, nunca estudié nada, sabía leer y escribir, y era inteligente antes de ir a la escuela, pero a pesar de eso siempre hice lo que quise. Cuando entré a estudiar música en el conservatorio era muy desordenada; estudiar música clásica disciplina y yo quería crear y tocar la guitarra y estar con mis amigos, no aprenderme una partitura. Ahora que lo pienso, me hubiera encantado terminar la carrera.
Su primera relación con el público bogotano fue en Rock al Parque 2017, ¿Por qué se demoró tanto en venir al país?
Porque mis dos primeros discos los hice de forma independiente, no sabía si aquí tenía fans o no. Básicamente no tenía dinero para viajar a Colombia y costear una gira, entonces esa es la verdad, me tardé por eso.
¿Cómo siente esa influencia tan fuerte del género urbano en la música?
Estamos viviendo una revolución histórica de la música, hay un cambio importante como pasó con el rock, que se metió y se instaló. Hay todo tipo de reguetón, a mí me parece que hay propuestas muy interesantes. Al final la música es un reflejo de nuestra sociedad. Ahora la gente no quiere pensar, todo es efímero, todo es tan veloz, eso me asusta. Yo soy más de tomarme mi tiempo, y creo que la música no debería ser así, no estoy en contra de lo urbano, pero siento que, poco a poco, este género evolucionará a cosas más inteligentes, más pensantes.