En un movimiento forzoso pero necesario, la plataforma de Windows Phone 8.1 ha dejado de recibir cualquier tipo de actualizaciones.
El día de ayer, Microsoft terminó oficialmente con el soporte para todos los smartphones que utilizan su sistema operativo para dispositivos móviles: Windows Phone, con lo que, a partir de ahora, ningún equipo del mercado con Windows Phone 8.1 o inferior, recibirá una nueva actualización de sistema, parche de seguridad o ayuda técnica.
Esto significa que el 80% de todos los smartphones que Microsoft vendió con su sistema operativo, ha quedado obsoleto, y el resto ahora utiliza un sistema operativo diferente llamado Windows 10 Mobile OS, el cual parece tener el mismo destino que Windows Phone.
El problema que siempre tuvo Windows Phone, fue el limitado número de usuarios, que, a su vez, no generaba ningún tipo de incentivo para que los desarrolladores crearan contenido, y, sin contenido, el único resultado posible es la pérdida de más usuarios, por lo que Windows Phone siempre estuvo envuelto en este pequeño circulo vicioso.
A pesar de que Windows Phone 8.1 trajo consigo novedades como: el asistente inteligente llamado Cortana, un nuevo centro de notificaciones y algunos cambios en la interfaz de usuario, no logró obtener una cuota de mercado global mayor al 0.4%, y el 99.6% restante es repartido entre Apple y Google.
Aunque los esfuerzos de la compañía se “han centrado” en Windows 10 Mobile, algunos rumores indican que la empresa de Redmond ha movido todo el desarrollo de su último sistema operativo a una rama llamada “feature2”, la cual sólo se encargará de mantener el soporte del OS (Sistema Operativo) hasta el 9 de octubre del 2018, que es cuando termina su ciclo de vida oficial por parte de Microsoft.
El año pasado, la empresa destruyó su negocio de telefonía, y su lema “móviles primero, primero la nube” ha sido modificado recientemente por “nube inteligente”, donde su propio CEO, Satya Nadella, ha dejado muy en claro que el negocio de Microsoft para el futuro estará centrado en tecnologías basadas en la nube, donde no siempre se implica a Windows, y mucho menos en su versión para dispositivos móviles.
Una práctica que tampoco ha sido ajena a la compañía, es el interés de ofrecer distintas soluciones en los sistemas operativos de Apple y Google. De hecho, Microsoft ha desarrollado más aplicaciones en los últimos meses para Android y iOS que para su propio sistema operativo móvil.
Aun así, Windows 10 mobile es una experiencia increíble que permite a los usuarios muchas veces encontrarse en una posición de rendimiento satisfactoria que en una gama de los modelos Android, por ejemplo, con versiones que igualmente han dejado de recibir actualizaciones desde hace mucho, incluso hubo aquellos castigados que si acaso recibieron una actualización minima, como es el caso de Jelly Bean, que solo tuvo una actualización.