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Los peligros de la inteligencia artificial para la paz: reflexiones del papa Francisco

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Los peligros de la inteligencia artificial para la paz: reflexiones del papa Francisco

El papa Francisco ha expresado su preocupación por los posibles riesgos que la inteligencia artificial puede representar para la paz. En su reflexión, el papa insta a que el desarrollo de esta tecnología se enfoque en promover la fraternidad humana y la paz.

El papa Francisco expresó su deseo de que el progreso de la inteligencia artificial tenga un impacto positivo en la fraternidad y la paz entre los seres humanos.

El papa Francisco expresó su preocupación por los riesgos que puede implicar el uso inadecuado de la inteligencia artificial en términos de paz y supervivencia humana. También enfatizó la importancia de utilizar esta tecnología para ayudar a resolver conflictos y combatir las injusticias. Estas declaraciones fueron parte de su mensaje para la Jornada Mundial de la Paz.

En conmemoración de la Jornada Mundial de la Paz, que se celebra el 1 de enero por la Iglesia católica, el papa habló sobre los avances en la tecnología y la inteligencia artificial, destacando cómo han ayudado a resolver muchos problemas que afectaban la vida humana y causaban mucho sufrimiento.

Sin embargo, también señaló que esta situación ha dado lugar a un control sin precedentes sobre la realidad. Se están proporcionando al ser humano una amplia variedad de oportunidades, algunas de las cuales plantean un riesgo para la supervivencia de la humanidad y representan una amenaza para nuestro hogar común.

En su oración para el inicio del nuevo año, expresó su deseo de que el avance rápido de la inteligencia artificial no agrave las desigualdades y injusticias que ya existen en el mundo, sino que contribuya a poner fin a las guerras y conflictos, así como a mitigar el sufrimiento que afecta a la humanidad.

En su comunicado, Francisco advirtió que las tecnologías que emplean múltiples algoritmos pueden recopilar datos de los rastros digitales dejados en internet, lo cual permite controlar los hábitos mentales y de relación de las personas con fines comerciales o políticos, a menudo sin su conocimiento, lo que restringe su capacidad de elegir de manera consciente.

Es importante tener en cuenta que la investigación científica y las innovaciones tecnológicas son actividades humanas que están influenciadas por los valores personales, sociales y culturales de cada época.

El papa resaltó que la IA tiene el potencial de ofrecer beneficios como la reducción de esfuerzos, una producción más eficiente, transportes más rápidos y mercados más activos. También mencionó que la IA podría revolucionar los procesos de recopilación, organización y verificación de datos.

En cuanto a la capacidad de ciertos dispositivos para generar textos, se destaca que no se puede confiar plenamente en ellos, ya que pueden generar afirmaciones que parecen creíbles a simple vista, pero en realidad carecen de fundamentos o revelan prejuicios.

Esto plantea un grave problema cuando se utiliza inteligencia artificial en campañas de desinformación que propagan información falsa y generan desconfianza creciente hacia los medios de comunicación.

También mencionó que la enorme cantidad de datos analizados por las inteligencias artificiales no garantiza automáticamente imparcialidad. Existe el riesgo de distorsionar la información cuando los algoritmos extrapolan datos, lo que puede reproducir injusticias y prejuicios presentes en los entornos en los que se generan.

En su mensaje, se afirma que estas estrategias de manipulación o control social necesitan ser vigiladas y supervisadas de manera precisa, y que tanto los productores, los que las utilizan y las autoridades gubernamentales tienen una clara responsabilidad legal en relación a ellas.

El Papa también está preocupado por cómo las nuevas tecnologías pueden afectar al empleo, ya que cada vez más tareas que antes eran realizadas por personas son reemplazadas rápidamente por aplicaciones de inteligencia artificial en la industria.

El papa mencionó los riesgos presentes en la industria armamentista, particularmente en lo que respecta a los sistemas de armas autónomos. En este sentido, enfatizó la importancia de asegurar una supervisión humana adecuada, significativa y coherente de estos sistemas.

"No podemos descartar la posibilidad de que armas avanzadas caigan en manos equivocadas, lo que podría facilitar ataques terroristas o acciones destinadas a desestabilizar instituciones gubernamentales legítimas", mencionó.

También mencionó que las tecnologías más avanzadas no deben ser utilizadas para promover la violencia en la resolución de conflictos, sino más bien para promover la paz.

Francisco concluyó expresando su esperanza de que los avances en el desarrollo de la inteligencia artificial sean utilizados para promover la fraternidad y la paz entre los seres humanos.

Basado en datos proporcionados por la agencia

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