CIUDAD DE MÉXICO

En el futbol americano, las ofensivas normalmente son las que dan el espectáculo, las que definen los partidos y las que, en ocasiones, anotan el touchdown decisivo en un juego de playoff o en un Super Bowl.

Pero toda ofensiva necesita del balance de un buen ataque terrestre, que si bien es cierto no es tan atractivo como los pases largos, son los que consiguen las yardas necesarias para mantener a la ofensiva en el emparrillado.

Por eso no es de extrañar que los equipos con los mejores corredores ocupan normalmente las primeras posiciones en sus respectivas divisiones.

Los mejores ejemplos son el novato de los Vaqueros de Dallas, Ezekiel Elliott, quien es el mejor en su posición de toda la NFL con mill 392 yardas y 12 touchdowns. y es el líder de un equipo que tiene marca de 11-2.

El mejor pasador es Drew Brees, con cuatro mil 170 yardas y 30 TD, pero con Nueva Orleans que tiene muy pocas esperanzas de avanzar a playoffs, y su mejor corredor es Mark Ingram, con apenas 772 yardas y tres anotaciones.

Elliott fue la cuarta selección global del draft, y ha balanceado un ataque con el también novato Dak Prescott, quien ocupa el lugar 18 entre los QB de la liga, y suma además 20 pases de anotación.

Después está el exVaquero, DeMarco Murray, quien ha sabido llevar a los Titanes a la cima de la División Sur de la AFC gracias a sus mil 135 yardas y nueve anotaciones.

Lo mismo sucede con Le’Veon Bell, de los Acereros y quien el domingo anterior sumó 236 yardas para llevar a Pittsburgh al triunfo, con todo y la pésima actuación del QB Ben Roethlisberger, quien sumó tres intercepciones y acumuló un pobre rating para pasador de 37.8.

Con los Patriotas está LeGarrette Blount, quien ha tenido una temporada que nadie esperaba y suma ya 14 acarreos de TD para darle ser el soporte necesario a un pasador como Tom Brady, fuerte candidato a ser el MVP de la temporada.

cmb