En una extensión de 310 metros cuadrados de lo que era el laboratorio de materiales de la Facultad de Ingeniería de la UAEM, fue construido el segundo vitral más grande de Latinoamérica: “Los Elementos”, la obra que la muerte le impidió culminar a Leopoldo Flores.A un año del fallecimiento del artista plástico originario del municipio de Tenancingo, ayer fue inaugurada esta obra. En este vitral, el hombre resurge en los cuatro elementos (fuego, aire, tierra y agua) para alcanzar el cosmos.“Los pensadores griegos decían que el universo estaba formado por estos cuatro elementos: fuego, tierra, aire y agua, que le daban su esencia y razón de ser al hombre”, explicó Raúl Vera Noguez, director de la Facultad de Ingeniería.A finales del año 2013 Leopoldo Flores inició esta obra, que ni el Parkinson le impidió crear, aunque al morir fue su equipo de trabajo quien se encargó de concluirla.Esta pieza es para vivirla por dentro de día y por afuera de noche, por el espectáculo de colores que proyecta al interior y exterior del edificio.Serán libros, y no plantas como en el Cosmovitral, que habitarán en este recinto ya que se tiene proyectada la construcción de una biblioteca en este edificio de más de seis décadas de antigüedad.“Los Elementos” es la continuación de “Aratmósfera”, la obra que se encuentra en el estadio de Ciudad Universitaria. Con información de Alma Ríos. leer más

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Post y Contenido Original de : El Gráfico
Leopoldo Flores deja legado de luz y color
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