La posible visita a Venezuela de la alta comisionada de la ONU para los derechos humanos, Michelle Bachelet, debe tener “condiciones claras” para que pueda reunirse con “todos los actores” de la crisis en ese país, afirmó la representante para América del Sur del ACNUDH, Birgit Gerstenberg.
“Para monitorear la situación tenemos que hablar con todos los actores, sin ninguna limitación, no solamente con el Gobierno, y debemos tener acceso a ciertos lugares que queremos ver”, afirmó en una entrevista con Efe la representante del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH).
La alemana Gerstenberg explicó que el ACNUDH está “preocupado por la situación de los derechos humanos” en Venezuela, especialmente por la falta de alimentos y el deterioro de los “estándares de vida básicos”, que obligan a la población “a buscarse la vida de alguna manera”.
Después de varios años en los que a los representantes de ese organismo de la ONU se les ha negado el ingreso a Venezuela, Gerstenberg valoró la invitación del presidente Nicolás Maduro a Bachelet y consideró que es una “oportunidad” para retomar las relaciones.
“Como no pudimos entrar al país por mucho tiempo, nos interesa que esa visita se lleve a cabo lo más pronto posible y esa es la voluntad también del Gobierno venezolano”, señaló la representante regional, cuya misión es promover y proteger los derechos humanos en Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Ecuador, Paraguay, Perú, Uruguay y Venezuela.
Desde que Maduro hizo la invitación a Bachelet, representantes de la oposición venezolana y familiares de los llamados presos políticos han pedido en varias ocasiones que se fije la fecha de la visita y se le permita reunirse con ellos.
Gerstenberg asumió el cargo de representante regional del ACNUDH en mayo pasado y ha dedicado los primeros meses de su gestión a visitar los países de la región para detectar las principales “urgencias” en materia de derechos humanos.
Una de las situaciones que más le preocupa es el alza de los asesinatos de activistas y defensores de los derechos humanos, un tema en el que Latinoamérica tiene un “triste récord” y que afecta particularmente a Colombia, Brasil y México.
También denunció la “tendencia” de grupos de la sociedad civil e incluso de algunos Gobiernos a negar o hacer retroceder los derechos que habían logrado las mujeres y otros grupos de la población. “Las mujeres, personas LGTBI, pueblos indígenas, personas con discapacidad, personas de edad y los jóvenes, especialmente de color, son atacados, discriminados y criminalizados en muchos países de la región”, sostuvo Gerstenberg.
Por Gerard Soler (EFE)
Source: Infobae