Ella es Ivy Angerman de Minnesota, una niña de un año de edad, que nació con una rara enfermedad, la cual provoca que su cuerpo reaccione al contacto con el agua como si lo estuviera quemando con fuego.

Su madre, mencionó que comenzó a notar las irritaciones y cambio en su piel a partir de los seis meses de nacida.

Urticaria, ampollas y erupciones rojizas, eran las principales lesiones que aparecían y que provocaban un dolor desgarrador en la pequeña.

Al llevarla con el médico, éste detectó la enfermedad y les dio un tratamiento, que hace algunos meses comenzó a dejar de funcionar en su sistema.

Todo tipo de agua causa reacción en Ivy, ya sea la de la ducha, sus lágrimas, sudor o incluso la lluvia.

Durante entrevista, la madre también mencionó lo difícil que será para ella tener que decirle a su pequeña hija que no podrá jugar en la alberca en verano o mojarse en la lluvia junto a sus hermanos.

Poco después de hacerse viral su caso, la familia de Ivy creó una cuenta en el portal, GoFoundMe, para lograr recabar fondos y poder mudarse a una casa con un ‘pozo’, un sistema de agua purificada y aire central que podría ayudar a minimizar el dolor al momento de bañarla.

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Source: Ay Ojon