Cuando hay problemas entre los niños, los padres se ven en una situación bastante complicada. Hay un amplio margen de reacciones entre decir “son cosas de niños” y meterse en cuanta discusión de infantes tengan. Como padres debemos cuidar nuestra imagen delante de nuestros hijos, porque somos su máximo ejemplo en la vida.
En esta grabación se mezcla este tema con la agresividad que pueden tener los padres frente a sus pequeños, y en esta ocasión se puede ver la esencia de cada uno de los adultos participantes, en especial de uno con rasgos de violencia absoluta.
Dos familias con sus hijos estaban almorzando en un restaurant de Sudáfrica, cuando uno de los niños de la mujer que sale en el video comenzó a pegarle en la cabeza de uno de lo pequeños del sujeto que la encara, quien estaba viendo toda la situación.
Cuando el tipo se acerca a esta madre, que estaba con muchos niños sentada alrededor de la mesa, llega con un tono intimidante frente a toda la mesa, para decirle que discipline a su pequeño.
La mujer, ante la amenaza, no se deja pasar a llevar y le responde a gritos provocando al hombre, quien en un momento aprieta su puño haciendo parecer como si la quisiera golpear. La hija y madre del tipo le piden que se detenga, mientras que otra mujer del local protesta diciendo que no puede golpear a una mujer.
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“Mira el tamaño de tu hija. Golpeando en la cabeza. Estoy mirando a través de la ventana y ella está golpeando a mi hija en la cabeza”.
Le dice el tipo.
“No puedes venir aquí a hacerte el bravucón. Un hombre tan grande siendo un bravucón”.
Le responde la mujer.
“Estoy diciendo diciendo que hagas algo”. Continúa el padre.
“Ándate a la mierda”
Le responde enojada la mujer.
“Trata de golpearme y verás”.
Amenazó la madre, mientras el sujeto se va y se da vuelta con una mirada furiosa gritándole obscenidades, cuando de repente se devuelve y le mueve la mesa aterrorizando a todos los del lugar. Finalmente se fue, y todo el ambiente quedó muy tenso.
Ms. Mabuya es como se identifica a la madre afectada, quien en un momento se toma todo esto como un ataque racista, aunque el tipo no haya hecho ningún comentario al respecto.
“Por si no lo has notado, este es un país democrático. Vengo aquí a usar mi dinero. No puedes venir y decirme que me vaya a la mierda. No puedes venir aquí a amenazar porque soy negra. ¿Es porque soy negra?”. Le grita furiosa.
“Tu hija estaba molestando a la mía. Sólo porque mi hija la está golpeando de vuelta, es un problema”. Continúa.
Ms. Mabuya trabaja como enfermera en un hospital de Johannesburgo, y comenta que estaba el lugar con una amiga para celebrar el cumpleaños de su ahijado.
Afirmó que lamentaba haber usado ese lenguaje, pero sintió que tenía que hacerlo ya que nadie del restorán la protegió.
“Me pusieron en el lugar de defender a mi hija”. Comenta.
“Creo que él vino a nosotros porque vio a una mujer africana sentada sin ningún hombre, y pensó que sería fácil aterrorizarnos. Pienso que era un racista por intimidarnos así”.
“No estoy de acuerdo con mi lenguaje pero estaba muy asustada de que pudiera golpearme hasta destruirme”.
“Se fueron tan incómodos. Como si nada hubiera ocurrido. Mis niños estaban aterrorizados”.
“Habían vasos y cuchillos en la mesa que pudieron haberlos herido. Creo que la gerencia tenía miedo de él… Pero no pude dejar que caminara sobre mi”.
“Los niños están traumatizados. No pueden dejar de hablar de lo que pasó. No estoy orgullosa de mi comportamiento pero estaba muy asustada y nadie vino a ayudarme”.
El restorán Spur Steak Ranches comentó que si bien sus trabajadores intentaron detenerlo, fueron empujados por el furioso tipo numerosas veces.
El staff se ha disculpado con Ms. Mabuya y le ofrecieron el pago de vuelta como consuelo para ella y su familia.
“Reconocemos que el staff y la gerencia del restorán no hicieron lo suficiente para ayudar a Ms. Mabuya”.
Comentó una de las voces del local.
“Nos dirigimos a la gerencia y estamos revisando nuestros procedimientos internos. La agresión física a nuestros clientes, particularmente contra mujeres y niños no será toleradas”.
Sin duda que la forma que el tipo trató a esta madre no fue la correcta. A través de su actitud se pudieron percibir rasgos de agresividad, alguien que pone en peligro el bienestar de cualquier mujer o niño.
Muchas mujeres se ven intimidadas por sujetos como éste, quienes creen que por tener más fuerza pueden hacer lo que quieran a su alrededor.
Si queremos que estos problemas se detengan, cuando seamos testigos todos debemos reaccionar rápida e inteligentemente y no quedarnos mirando como agreden a las personas, excluyéndonos de la escena sólo para tomar el camino fácil. Al callarnos, nuestra presencia no está siendo un aporte a la sociedad, y como individuos que vivimos en conjunto debemos luchar por un mundo mejor. Dejemos el egoísmo y empaticemos con el resto.
Cuando el destino nos pone en un lugar determinado en el momento preciso, no es por ninguna razón. Es para que hagamos algo al respecto y no ignoremos lo que está sucediendo. Después de todo, esas personas en riesgo podríamos ser cualquiera de nosotros.
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Post y Contenido Original de : UPSOCL
La atemorizante intimidación de este tipo a una mujer de raza negra dejó en shock a todo un restorán
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