Manuel López – enero 22, 2021
La Unión Interdisciplinaria de Farmacias Clínicas y Consultorios (UNIFACC) reconoció que los -costos- de los medicamentos y materiales médicos para la atención de pacientes con covid-19 han incrementado entre 30 y 200 por ciento en el Valle de México.
El Doctor Oscar Zavala, presidente de la UNIFACC, detalló que una familia puede gastar hasta 50 mil pesos para atender a un enfermo, que presenta todos los síntomas, aunque la cifra aumenta si más de uno llega a contagiarse.
«Hay casos de familias enteras que llegan a contagiarse y han tenido que vender parte de su patrimonio para poder costear los medicamentos. También se ha registrado que para aminorar los costos dos o más personas comparten el mismo tratamiento, pero eso no es recomendable», comentó.
Entre los insumos más encarecidos son los tanques de oxígeno, que anteriormente podían encontrarse hasta en 2 mil pesos dependiendo de la capacidad de litros y hoy en día se ofertan hasta en 40 mil pesos.
Otro de los materiales que han elevado su precio son los concentradores de oxígeno, indispensables para atender problemas respiratorios, y que tenían un precio de 3 mil 500 pesos en promedio y hoy se ofertan hasta en 30 mil pesos.
«Es dependiendo la capacidad, antes los tanques nuevos de la capacidad más baja que son 682 litros, antes de la pandemia costaba mil 200 y hasta 2 mil pesos y ahorita hasta 10 mil pesos».
El incremento en los precios no solo está en los insumos como guantes, cubrebocas o caretas, sino también en los medicamentos como la Azitromicina, para tratar ciertas infecciones como la bronquitis y neumonía.
«Antes de la pandemia para el mes de marzo, que fue cuando llegó la pandemia, un antibiótico como la Azitromicina tenía un costo de 120 pesos y ahorita puede llegar a costar hasta 599 pesos», aseguró.
Ante ello, integrantes de la UNIFACC decidieron disminuir el margen de ganancia en un 50 por ciento en farmacias establecidas en las zonas con mayor riesgo de contagio y con alto índice de marginación en el Valle de México para apoyar a las familias infectadas.
«La estrategia que tenemos ahora es bajar el margen de utilidad en los medicamentos más indispensables. Teníamos un 10 por ciento y ahora lo reducimos a 5 por ciento para apoyar a esas personas que no han podido adquirir los medicamentos para su atención».