El candidato por Morena siempre se ha enfocado a la social-democracia, con la cual dirigió el municipio León hace una década.
Aunque Ricardo Sheffield, candidato a la presidencia municipal de León, ha sido señalado por sus detractores por haber militado en el Partido Acción Nacional (PAN) y actualmente contender por el Movimiento Regeneración Nacional (Morena), aseguró que se debió al cambio de los valores en el blanquiazul.
Sheffield, quien a partir del 1 de diciembre de 2018 dirigió la Profeco a nivel federal por invitación del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró que se abandonó al PAN social-demócrata de su presidente Adolfo Christlieb Ibarrola (1919 –1969), pues el partido olvidó lo demócrata y luego lo social.
“Yo tuve un gobierno totalmente social-demócrata que a muchos de la extrema derecha del PAN no les gustó para nada; decían que era un gobierno populista, no saben distinguir entre social-democracia y populismo, no se parecen en nada”, dijo Ricardo Sheffield al explicar el motivo por el que se sumó a Morena, partido político que vela por los que menos tienen y que, con pasión, transformará a León para que vuelva a ser la ciudad que era.
“Soy el de siempre, sigo manteniendo mis principios, sigo consagrado a trabajar por León, por los más pobres”, asegura Sheffield. “Mis adversarios son los que abandonaron a la ciudad, a su gente, pero lo vamos a cambiar este 6 de junio”.
A pesar de que lo atacan por ser parte de las filas de Morena, Ricardo Sheffield asegura que son sus detractores los que han abandonado a León y traicionaron la confianza de los ciudadanos, al dedicarse a realizar negocios a costa de la ciudad.
“Yo sigo siendo el mismo, no he traicionado mis principios, sigo viendo por los que menos tienen. He consagrado mi vida a trabajar por León, en cada responsabilidad que he tenido siempre he visto por nuestra tierra. Voy a seguir haciéndolo y ahora con más pasión que nunca”.
Algunos usuarios en redes sociales manifestaron que no es incorrecto cambiar de partido cuando los valores ya no están acorde a los correctos, ya que cuando los valores no concuerdan con los principios se debe tomar la decisión de elegir entre las propias convicciones o las de otros; sin embargo, lamentaron que no todos lo vean de esa manera.