En una reciente actualización, la agencia Fitch ha modificado la perspectiva de Pemex, la empresa petrolera mexicana, de "negativa" a "estable". Además, ha mantenido su calificación crediticia en "B+".
Fitch ha modificado la visión de Pemex de ser "negativa" a "estable" y ha decidido mantener su calificación crediticia en "B+".
Fitch Ratings ha modificado la visión de Petróleos Mexicanos (Pemex) de ‘negativa’ a ‘estable’ y ha mantenido su calificación crediticia en ‘B+’ debido a la mayor dedicación del Gobierno de México para cumplir con los pagos de la deuda.
La calificadora anunció que la inclusión de Pemex en el presupuesto anual, por primera vez, tiene un impacto positivo en el crédito y ha resuelto las preocupaciones de Fitch sobre la capacidad y disposición del gobierno para apoyar a Pemex de manera significativa.
En julio pasado, Fitch redujo su calificación debido a un bajo rendimiento operativo constante y advirtió que esto afectaría sus opciones de financiamiento.
Tomando en cuenta la situación de la empresa, se puede afirmar que su situación financiera es precaria y sus estándares medioambientales deficientes dificultan su capacidad para obtener fondos, una expectativa que se ha mantenido.
No obstante, cerca del final del año, la agencia de calificación pronostica una situación más favorable para la empresa petrolera estatal mexicana. Esto se debe a que el Gobierno de México ha incluido de forma transparente un respaldo presupuestario de 8 mil 500 millones de dólares para hacer frente a los pagos previstos para 2024.
Por otro lado, la agencia global señaló que Pemex todavía enfrenta un déficit de 30 mil millones de dólares en los próximos cuatro años, lo que lo sitúa cuatro niveles por debajo de los estándares soberanos. Además, la compañía tiene un déficit de efectivo promedio de 7.000 millones de dólares por año y vencimientos por un total de 20 mil millones de dólares entre 2025 y 2027.
Al finalizar el tercer trimestre de 2023, la empresa registró una deuda de 105 mil millones de dólares. Sin embargo, al finalizar el año 2022, obtuvo un resultado positivo con una ganancia neta de 1.187 millones de dólares, poniendo fin a nueve años seguidos de pérdidas.
Adicionalmente, Fitch señaló que las futuras elecciones presidenciales en México en 2024 están generando dudas acerca de si el Gobierno mexicano seguirá brindando apoyo financiero en los años siguientes.
Además, mencionó que deberá enfrentarse a costosas inversiones en infraestructura debido a los numerosos incidentes que han ocurrido en sus instalaciones.
Según Fitch, los numerosos incendios que han ocurrido en activos e infraestructura críticos, causando lesiones y muertes a los empleados, indican preocupaciones sobre la gestión de las operaciones o la falta de inversión en el mantenimiento de dichos activos e infraestructura.
Basado en reportes de la Agencia E
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