De acuerdo con información del periódico local A Fondo Estado de México, durante la madrugada del sábado una llamada anónima reportó a las autoridades del estado sobre el olor putrefacto que se desprendía de la casa perteneciente al hombre desaparecido desde el 23 de julio, Roberto Martínez Ledesma.

La Fiscalía General de Justicia del Estado de Mexico (FGEM) confirmó el hallazgo de los cuerpos de el padre de 58 años de edad y su hija Emily. Los cadáveres fueron enterrados con cal y arena, y con rastros de que fueron quemados parcialmente.

Desde el pasado domingo comenzó el calvario para sus familiares, quienes narraron que tras una fiesta en la casa de Roberto, su hija y él se fueron a dormir después de que los invitados se fueran.

Al siguiente día, cuando la madre de Emily fue a buscarla, se encontró con un desgarrador escenario. La casa estaba vacía y en el inmueble había rastros de sangre en uno de los cuartos.

La familia procedió a iniciar una denuncia registrada con el folio SABEN/879/2017 de Alerta Amber por la menor y una más en Odisea por la desaparición del padre. Además, junto con vecinos, bloquearon la carretera México Pachuca para exigir a las autoridades el apoyo en la búsqueda.

Uno de los implicados en el caso fue el primo de la menor, quien fue el último en verlos con vida antes de dejar la fiesta. El familiar que responde al nombre de Freddy dijo al principio de la investigación que uno de los asesinos intentó secuestrarlo al salir del lugar de la celebración. Sin embargo, ya detenido por las contradicciones en su declaración, confesó al hermano de Emily que él fue quien saltó la barda de la casa y dio acceso a los cuatro hombres que mataron a su padre y a la pequeña.

 

También declaró que vio cómo los hombres asesinaron a Roberto y abusaron sexualmente de la menor. Según su versión, Freddy tuvo un momento de arrepentimiento e intentó encender una camioneta para atropellar a los sujetos pero no lo logró.

El Estado de México, considera la entidad con más habitantes del país -con 17 millones 26 mil 314 personas-, se ha convertido en una de las más violentas, es líder en homicidios dolosos, feminicidios, e incluso robos a traseúntes y autos.

De acuerdo con las cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), la entidad gobernada por el priista Eruviel Ávila Villegas, es la segunda entidad más violenta del país, de acuerdo con cifras oficiales.

De enero a mayo de este año, ha reportado el secuestro de 71 personas y 855 homicidios dolosos.

En tanto, durante el primer semestre de este año, se han presentado al menos 32 mil 419 denuncias por robo común, que incluyen robos con y sin violencia de vehículos, a casas, a negocios, transportistas, transeúntes y otros no especificados.

En los primeros cinco meses y medio del año, 112 mujeres del Estado de México han sido asesinadas por ser mujeres. Aunque desde 2015 la SCJN determinó que las autoridades investiguen con perspectiva de género y sin discriminación todas las muertes de este tipo, de los 626 casos ocurridos en la entidad durante 2016, solo 296 de ellos (el 47 por ciento) fueron investigados como feminicidios.