“Va a haber un gobierno que va a representar a los ciudadanos mexicanos y que va a cuidar que el patrimonio de los mexicanos”.
Entrevistado en el aeropuerto de Villahermosa, Tabasco, desde donde viajó hoy a la Ciudad de México, Obrador afirmó entender las críticas, pero advirtió que no será tapadera y alcahuete de nadie.
“SI, yo creo que es natural que exista la crítica porque durante muchos años se llevó a cabo una política en donde no contaba el pueblo, eran nada más los políticos y los llamados hombres de negocios los que dominan México, ahora el gobierno va a representar a todos, a ricos y a pobres, y va a haber un gobierno que va a representar a los ciudadanos mexicanos y que va a cuidar que el patrimonio de los mexicanos, el patrimonio nacional, que no beneficie a una minoría, sino sea en beneficio de todos los mexicanos.
“Yo los entiendo, pero el pueblo votó para que haya un cambio verdadero, y yo no voy a ser tapadera de nadie, no voy a ser alcahuete, yo voy a cumplirle a los mexicanos”, aseveró.
Sobre el proceso de descentralización de las dependencias del gobierno federal, López Obrador insistió en que será un proceso paulatino, y confió en que a final de su sexenio, todas las Secretarias de Estado estén operando en los estados.
Andrés Manuel López Obrador estuvo el fin de semana en Chiapas, donde dijo que haría consultas con habitantes de comunidades indígenas, respecto a los proyectos productivos que impulsará en la región, una vez que asuma el cargo de Presidente de la República, el 1 de diciembre.