No es casualidad que desde niños tengamos una fascinación especial por los trenes, su traqueteo constante, los divertidos ruidos que emanan de la locomotora, o el mismo ritual del sellado de boleto por parte del revisor es mágico; todo ello lo tenemos guardado en nuestras retinas aun si jamás hemos vivido la experiencia. Hasta la fecha, y desde tiempos del Porfiriato, no existía en México un tren que le hiciera justicia a nuestro niño interior así que la renovación del Chepe Express es un motivo de alegría y una obligación para disfrutarlo, por lo menos, una vez en la vida.
La ruta existe desde 1961, y la línea férrea data del siglo XIX por lo que el trayecto que une Sinaloa con Chihuahua y atraviesa las famosas “Barrancas del Cobre”, además de ser una experiencia inolvidable, tiene una gran carga histórica.
El Chepe Express es un ferrocarril de alta gama que puede competir sin titubear con los ya clásicos trenes de lujo que funcionan en la India o en Europa. Cuenta con nueve carros de pasajeros con un estilo y equipamiento únicos ya que todo está hecho con materiales mexicanos. Para su interiorismo, que destaca pormantener su carácter icónico gracias aventanas panorámicas y materiales de gran lujo, se contó con la colaboración del despacho Oxígeno Arquitectura. Además, la joya del tren la firma el chef Daniel Ovadia ya que el convoy también cuenta con una terraza, un bar y un carro domo de dos pisos que alberga el restaurante Urike, mismo que en su menú nos acercará los sabores y olores de la región serrana del norte del país.
La ruta del Chepe Express
Pero no sólo las instalaciones del Chepe Express son toda una experiencia -que lo son-, la ruta que comienza en Los Mochis y termina en Creel ofrece espectaculares paisajes y aventuras inolvidables para toda la familia gracias también a las dos paradas intermedias en El Fuerte y Divisadero.
Desde el 17 de mayo, el tren recorre de manera diaria los más de 350 kilómetros que separan Los Mochis de Creel y aunque cuenta con capacidad para transportar a 350 personas, sólo 48 entán reservados para la clase ejecutiva, mismos que te permitirán disfrutar del paisaje de la Sierra Tarahumara con todo lujo de detalles.