CALIFORNIA.
El gran incendio forestal en el sur de California estaba contenido en un 50% el martes al amainar los fuertes vientos, pero las autoridades advirtieron que podrían regresar las peligrosas ráfagas.
Los bomberos iniciaron contrafuegos para eliminar extensiones de matorrales secos en el borde norte del incendio.
Vamos a eliminar una buena parte del combustible”, dijo el capitán de bomberos Rick Crawford. “Así cuando vuelvan los vientos no habrá nada que quemar”.
Los vecinos de la ciudad de Ojai podían ver el humo del incendio controlado, dijo Crawford.
Se pronostica que los vientos fuertes y cálidos que atizaron las llamas y obligaron a realizar nuevas evacuaciones el fin de semana pasado regresarán el miércoles.
El incendio al noroeste de Los Ángeles, que abarca ya mil 095 kilómetros cuadrados (423 millas cuadradas), es el tercero más extenso de la historia del estado desde 1932, cuando se empezaron a llevar registros precisos.
Las autoridades calculan que el incendio Thomas se extenderá hasta convertirse en el más grande de la historia antes de ser contenido totalmente, lo que se prevé para el 7 de enero.
Algunos vecinos pudieron regresar a sus hogares el lunes y otros podrán hacerlo el martes, dijo Crawford.
Sin embargo, advirtió que las casas en las laderas cerca de la ciudad de Santa Bárbara siguen bajo amenaza.
El incendio alimentado por los matorrales en los condados de Ventura y Santa Bárbara ha destruido un millar de estructuras, incluidas unas 750 viviendas.
El bombero Cory Iverson, de 32 años, murió el 14 de diciembre de quemaduras e inhalación de humo cuando combatía las llamas. El 6 de diciembre una mujer de 70 años murió en un accidente de ruta cuando huía del incendio.
Más de ocho mil bomberos de una docena de estados combaten las llamas. El costo hasta el momento está calculado en 130 millones de dólares.
Source: Excelsior