Cuando el hombre eyacula… ¿termina la relación sexual?
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NO. Cuando decimos que la relación sexual no termina luego que el hombre eyacula, significa que la relación sexual NO es solo coito, es algo más, es intimidad, afecto, compromiso, sentirse seguro en compañía del otro. Esto significa sintonizar con lo que al otro le gusta. Si ambos miembros de la pareja se sienten cómodos, y no quieren iniciar de nuevo una relación sexual coital, pueden aprovechar para tocarse sin sentir la presión de tener un orgasmo, y descubrir áreas de su cuerpo que normalmente no son tocadas, y aprender a descubrir zonas diferentes, y/o nuevas de placer.
Tan pronto ocurre la eyaculación en el hombre, el pene se torna flácido, lo que hace imposible la penetración; el hombre entra en un periodo llamado refractario, donde necesita recuperar la energía gastada en el acto sexual, contrario a lo que sucede en la mujer, qué tan pronto tiene un orgasmo, disminuye la tensión sexual, pero tiene la capacidad de que al ser estimulada nuevamente pueda volver a obtener uno o varios más. Esta capacidad de la mujer es completamente normal, y puede ser aprovechada por ambos miembros de la pareja para seguir disfrutando en franca camaradería sexual. Este tiempo puede ser aprovechado por el hombre para acariciar su pareja, estimularla de nuevo hasta que alcance el orgasmo, volver a encender la pasión hasta que él se recupere y pueda excitarse de nuevo.
Es importante que sepamos que intimidad no es sinónimo de tener una relación sexual, intimar es disfrutar al lado de la pareja, conversar, recordar hechos pasados, fantasear, acariciarse, besarse, sin esperar una relación sexual y orgasmo a cambio. La pareja no debe olvidarse del romanticismo, de tener una comunicación franca, de hablar de los sentimientos, del placer de estar juntos.
Aprovechar este tiempo después de la eyaculación ayuda a reforzar la relación de intimidad en la pareja.