Pese a los avances en la investigación y en los tratamientos médicos –cada vez más eficaces a la hora de combatirlo– el cáncer sigue siendo una de las principales causas de muerte a nivel mundial.
Esta enfermedad, siempre peligrosa, parte de una alteración a nivel celular provocada por causas externas, factores genéticos o una combinación de ambos elementos, que es la que da lugar a los distintos tipos de cáncer. La mayoría de ellos se denomina por el órgano en el que aparecen tumores malignos: cáncer de colon, de hígado, de páncreas, de mama… Pero no hay que olvidar que también hay cánceres menos conocidos pero igual de peligrosos, como la leucemia linfática, el cáncer de tiroides o el melanoma (cáncer de piel).
¿Qué tipo de cáncer implica mayor riesgo?
Todos son peligrosos, pero en algunos se ha conseguido vencer y eliminar las células dañadas con mayor facilidad, mientras que en otros, la resistencia a los tratamientos y la posibilidad de metástasis dificultan la lucha contra la enfermedad.
A la hora de hablar de qué cáncer puede implicar un riesgo mayor o menor, hay que ser muy cautos, porque el desarrollo de la enfermedad, en cada persona, es distinto. Aun así, atendiendo a las estadísticas, los tipos de cáncer que conllevan una mayor mortalidad y son, por tanto, los más peligrosos según la Organización Mundial de la Salud (OMS), son el cáncer de pulmón, de hígado, de estómago, de colon y de mama.
No hay que confundir riesgo y peligro con número de casos. Por ejemplo, el cáncer de mama, en mujeres, es uno de los más comunes en España, pero detectado a tiempo, el índice de curación total es de los más elevados. Lo mismo ocurre con el de próstata si nos centramos en la población masculina. Es de los más frecuentes, por lo que el índice de mortalidad resulta elevado por el número de personas afectadas aunque, en realidad, superarlo con la detección precoz y el tratamiento adecuado es más que probable.
En definitiva, los tipos de cáncer más agresivos y que más muertes causan en España son el de pulmón –con diferencia–, el de mama –por número de casos detectados– y el de colon y recto.
En el Día Mundial contra el Cáncer no está de más recordar la importancia de seguir una dieta equilibrada y unos hábitos saludables, que incluyan algo de ejercicio físico diario, con el objetivo de reducir el riesgo de llegar a padecer esta enfermedad cuya curación total, no hay que ovidar, está cada día está más cerca.