El paciente desarrolló gangrena de Fourier, tras las lesiones realizadas con el catéter y concluyó en la pérdida de sus partes íntimas.
La fascitis necrosante es una fuerte infección que destruye en tejido, es conocida como “bacteria devoradora de carne” y en los genitales recibe el nombre de gangrena de Fournier.
Los hechos ocurrieron en Uttar Predesh, el hombre acudió a ser tratado por su cáncer de tiroides, se le extirpó la glándula y posteriormente fue dado de alta, informó BMJ Casa Reports.
Una vez en casa, tras las lesiones que había sufrido por el catéter, el prepucio se inflamó y se ennegreció; fue dos semanas después que acudió a un especialista, pero la gangrena había avanzado. La parte interna de su sistema urinario se encontraba bien, pero había sufrido una autoamputación del falo y se recurrió a una penectomía total para limpiar la zona..
Solo hay documentados dos casos más de autoamputación del miembro en hombres.