CIUDAD DE MÉXICO.
Mariclaire Acosta Urquidi, quien asumió este jueves la presidencia del Comité de Participación Ciudadana del Sistema Nacional Anticorrupción, habló sobre los retos del organismo y advirtió que el panorama se ve “difícil por dos cosas, primero: el año electoral complicadísimo, yo creo que como no lo habíamos visto nunca, y segundo, por un sistema anticorrupción incompleto”.
En entrevista con Pascal Beltrán del Río para Imagen Radio, la presidenta del CPC señaló que “va a ser complicado porque no tenemos todas las herramientas que debe tener el Sistema Nacional Anticorrupción, aunque eso no le ha impedido avanzar.
El Instituto Nacional Electoral, dijo, sacó hace unos años un estudio de “El estado de la ciudadanía” y ahí se mencionó la gravedad de la corrupción, de la impunidad, de no contar con un Estado de derecho y, además, tener un problema de autoritarismo.
No hemos construido las instituciones que se requieren para la democracia sustantiva. No todos estamos iguales ante la ley y eso es contra lo que tenemos que luchar”.
Puntualizó que, “frente a la posibilidad de que tengamos muchas conductas corruptas y financiamientos ilícitos de campañas, etcétera, pues va a ser complicado no contar con todas las herramientas que debe tener el Sistema Nacional Anticorrupción”.
Sin embargo, señaló que hay una carta de intención firmada en el Instituto Nacional Electoral, hay relación con la Fepade y, dentro de las facultades, tratarán de apoyar la fiscalización.
A la pregunta sobre cuál es su diagnóstico respecto de la falta de piezas claves del Sistema Nacional Anticorrupción, Acosta respondió que los partidos están anteponiendo intereses políticos o de grupo, personales, a los intereses de la nación y que esto es muy grave “porque México es un país que realmente ha sido señalado en todos los índices mundiales como un país con graves problemas de corrupción y esto, digamos, no es sólo anecdótico”.
Afirmó que es grave el problema de la corrupción, porque se cobra 10% del PIB y porque no sólo afecta a la economía, sino que produce muertos, y puso de ejemplo las dos personas que murieron en el socavón del Paso Exprés, un hecho del que no se tiene claridad sobre lo que pasó, ni hay sanciones a responsables. Y esto, el hecho de que la ciudadanía desconfíe de las instituciones, no es positivo para nadie.
Es grave, agregó, porque la gente recurre a hacer justicia por propia mano, “además de que no hay Estado de derecho, hay autoritarismo”.
Source: Excelsior