CIUDAD DE MÉXICO

En los últimos siete meses los vendedores que fueron retirados del cruce de Insurgentes y Baja California ocuparon paulatinamente calles de la Colonia Roma, denunciaron dirigentes vecinales de ese barrio.

En un recorrido efectuado por las calles Durango, Valladolid, Álvaro Obregón, Insurgentes, Puebla, Jalapa y alrededor de 15 calles transversales se observó que el número de vendedores ambulantes de incrementó a partir del retiro de comerciantes de Insurgentes, en junio.

En un recorrido efectuado con integrantes de los comités vecinales Roma 1 y 3, los representantes puntualizaron que incluso ha crecido el número de puestos fijos metálicos donde se venden alimentos.

Vienen una noche a colocar puestos. A veces los retira la autoridad, en otras ocasiones lo dejan y luego viene otro puesto y otro, y así han ocupado calles casi completas”, expuso Mario Alberto Hernández, integrante del Comité Vecinal Roma Norte 3 durante el recorrido efectuado en calles de ese barrio.

En las calles Valladolid, Durango, Tonalá, Colima, Puebla, Jalapa, se han creado auténticos “corredores gastronómicos”.

Se trata de puestos colocados uno tras otro, con bancos en donde los comensales se sientan a consumir sus alimentos y llegan a bloquear el paso de peatones en las aceras.

Representantes vecinales destacaron que la mayor parte de los puestos no fueron autorizados por la delegación Cuauhtémoc, y han sido colocados mediante el cobijo de Diana, hija de Alejandra Barrios.

Cuando quitaron a los vendedores de Insurgentes y Baja California comenzaron a instalarse en calles dentro de la colonia, amparados por Diana y su madre, Alejandra Barrios”, destacó Lucero Rincón Gallardo, integrante del Comité Roma 1.

Destaca la intransitable acera poniente de Valladolid, entre Álvaro Obregón y Tabasco; los puestos colocados en la calle de Cozumel esquina Durango, o la proliferación de puestos en la calle Puebla, entre Insurgentes y Orizaba, incluyendo el costado de la Iglesia de la Sagrada Familia.

Otros casos son la esquina de Tonalá e Insurgentes, donde fue reubicado un puesto metálico de cerca de tres metros de largo; y las esquinas de Oaxaca y Valladolid, y Durango con Salamanca, donde los puestos ocupan el frente de bancos y cajeros automáticos, y ocuparon las jardineras que un restaurante había colocado para evitar la instalación de puestos informales.

La delegación Cuauhtémoc ha reconocido que es necesario cruzar los padrones de vendedores elaborados por la delegación con el número de vendedores que hay en la actualidad, pues sí hay un incremento notable de vendedores no autorizados.

*bb