Hace un par de veranos atrás, Joseph Phillips-Garcia, entonces de 16 años, salió junto a su tía, un primo, un amigo y su perro Sako en un viaje familiar. Pasaron todo el día cerca del lago Botanie, camino a su casa en Kanaka Nar. Como en todo viaje largo en coche, siempre hay alguien que aprovecha la oportunidad para dormir unos minutos o unas horas. Phillips-Garcia lo hizo.
En el camino, chocaron contra un camión, perdiendo por completo el control del volante. El coche cayó 100 metros por un precipicio hacia el bosque. “Pude sentir el camión pasando por encima. No entendía qué estaba pasando, y de repente me fui a negro”, cuenta en el video producido por Purina.
Todos los pasajeros que iban con él fallecieron, pero él sobrevivió. El chico quedó atrapado en el bosque con una pierna y su clavícula rota. Su fémur se había salido de su pierna, y era tanto el dolor que se desmayaba a ratos.
Durante dos días estuvo en el bosque, esperando que alguien lo ayudara. Sako, su pastor alemán de 4 años, también había sobrevivido y se quedó a su lado y abrigándolo con su cuerpo. En un momento incluso acercó trozos de troncos a su dueño, para que este encendiera un fuego, e incluso lo ayudó a arrastrarse a una cascada cercana donde ambos podían mantenerse hidratados.
Como estaban en un bosque, la presencia de osos y otro tipo de depredadores era un hecho. “Nos quedábamos dormidos hasta que escuchábamos aullidos. Sako se levantó al sentir más y más cerca el olor de otros animales”.
Corrió y se encontró con unos coyotes que andaban vigilando a los dos y “podía escucharlos pelear, se movían los arbustos. Regresó con una marca de mordedura en su cuello pero nada más. Así que me acosté a su lado, y me aseguré que se durmiera y estuviese cómodo”.
Al tercer día ya había perdido toda esperanza: “Me cubrí a mí mismo con rocas y acepté lo que se venía”.
Pero su familia llevaba esos tres días buscándolo, y 40 horas después del accidente, una prima lo vio. El grupo de rescate se tardó 3 horas en ayudarlo pero eventualmente pudieron recuperarlos y llevarlo a un hospital.
“No fueron sólo las acciones de Sako las que protegieron y salvaron a Joseph, sino que también su devoción y amor hacia su amor”, escribieron en el sitio oficial de Purina.
Source: UPSOCL