El fin de semana, algunas de las personas más poderosas e influyentes de México —entre ellas el presidente Enrique Peña Nieto— se reunieron para festejar el cumpleaños 70 del controvertido expresidente mexicano, Carlos Salinas de Gortari.
De acuerdo con un reporte del diario Reforma, la celebración fue en la casa de Salinas, en Condominios del Bosque, en la delegación Tlalpan, donde se sirvieron mariscos regalo del gobernador de Sinaloa, Quirino Ordaz.
Los asistentes disfrutaron de langostinos, camarones, pescado zarandeado, callo de hacha y sus famosos tacos “gobernador”, detalló el diario mexicano en una nota acompañada de algunas imágenes.
Entre los asistentes estuvieron los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Luis María Aguilar Molares, Jorge Mario Pardo y Eduardo Medina.
Del gabinete del actual presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, fueron a la fiesta; el secretario de Gobernación, Alfonso Navarrete; el titular de la secretaría de Salud, José Narro; Rosario Robles, de la Secretaría de Desarrollo Territorial; el nuevo titular de Sagarpa, Baltazar Hinojosa.
También fueron el gobernador del Estado de México, Alfredo del Mazo.
De acuerdo con Reforma, uno de los últimos en irse de la fiesta fue Carlos Romero Deschamps, líder del sindicato petrolero.
Aunque el candidato presidencial priista, José Antonio Meade, no fue a la fiesta, sí asistió su secretaria particular, Vanesa Rubio.
También estuvo presente Diego Fernández de Cevallos, jefe jurídico del candidato del Frente por México, Ricardo Anaya.
De esta manera es como queda evidenciado que la clase política en México esta estructurada en formas muy rígidas, y que muchos de los máximos actores politicos que gobiernan hoy el país, aun escuchan con atención a un ex presidente mexicano que, como dijera hace unos días Tatiana Clouthier, prometió que conectando a México en ambiciosos Tratados como el TLC, México habría de encontrar el camino hacia el éxito, la modernización, y la prosperidad. Usted entenderá.
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TLN