¿Existe acaso un animal más fiel al ser humano que el perro? No tiene que ser necesariamente la mascota de uno, porque un perro cualquiera es capaz de ayudarnos si estamos en problemas. Muchos son entrenados especialmente para rescates pero otros, sólo por instinto, corren a ayudar a seres vivos que necesitan de una mano (o pata). Amelia Milling, de 21 años, es sordomuda y experta en caminatas largas de todo tipo. Aunque siempre se prepara para el camino, a veces ocurren cosas inesperadas como es de esperarse estando en medio de la naturaleza. Comenzó a caminar por el sendero en Crow Pass Trail, en el parque de Chugach, Alaska, y llevaba 6 kilómetros cuando perdió el equilibrio y cayó 90 metros hacia abajo por una montaña nevada, golpeándose contra una enorme roca.
Sola en el suelo, en medio de la nada, vio una figura blanca acercarse a ella. Adolorida, intentó no entrar en pánico cuando vio a este animal que pensó era un enorme lobo.
Su pierna le dolía pero el lobo, que resultó ser un husky, la estaba esperando. En su collar decía “Nanook” y pensó que quizás estaba perdido, por lo que quiso ayudarlo. No mucho después se dio cuenta de que en realidad quien estaba siendo ayudada era ella, y que Nanook era un perro entrenado para ayudar a aquellas personas que tenían problemas en el camino.
Al día siguiente la pareja encontró un camino por donde tendrían que cruzar un río. Pero cuando Amelia saltó, cayó al agua y la corriente la empujó. Nanook de inmediato agarró con sus dientes su bolso, rescatándola.
Ya entonces la chica sabía que para regresar a casa necesitaría de más ayuda por lo que activó un aparato con GPS que le informaría a los rescatistas humanos de su ubicación.
Llegaron en helicóptero y la llevaron a casa pero ella insiste en que el verdadero héroe fue Nanook. Si no fuese por él y su compañía, ella habría quedado ahí sola por mucho más tiempo.
Source: UPSOCL
