Isaac Ramírez – enero 18, 2020
Desde este lunes, alrededor del 80 por ciento de los restaurantes que existen en el Estado de México iniciaron pláticas con autoridades municipales, a fin de que se les permita la instalación de mesas sobre las banquetas de sus establecimientos, con la intención de que puedan reabrir sus negocios con espacios al aire libre, pues carecen de terrazas, balcones o de espacios abiertos en su interior.
Y es que, una vez que se reconsideró a los negocios de venta de alimentos y bebidas como esenciales en el Estado de México, a efecto de que pudieran reabrir sus puertas aún con el semáforo epidemiológico en color rojo, cerca del 80 por ciento de los 70 mil restaurantes que permanecen en el territorio mexiquense no pudieron regresar ayer, ante la falta de condiciones que tienen sus negocios para ofrecer comida al aire libre.
El ex presidente de la Cámara Naciona de la Industria Restaurantera y de Alimentos Condimentados (Canirac) en el Valle de México, Marco Lambarri, señaló que, desde ayer, todo el sector comenzó a tener reuniones con los gobiernos de Atizapán, Huixquilucan, Naucalpan y Tlalnepantla, a efecto de que las direcciones de Desarrollo Económico o Promoción Económicas les expidan permisos a los restaurantes para ocupar las aceras o un carril en las calles, como sucede en la Ciudad de México, ante la falta de espacios abiertos en la mayoría de los espacios de venta de comida.
Indicó que el objetivo es evitar que las autoridades municipales lleguen a clausurar o suspender actividades por la ocupación del espacio público, por lo que la mayoría de los integrantes de este sector optó por esperar a contar con estos permisos para reabrir sus puertas, tras ser considerados como esenciales.
Marco Lambarri aseveró que, hasta el momento, la industria ha encontrado buena respuesta por parte de las autoridades locales, como las de Naucalpan, por lo que se prevé que, en el corto plazo, puedan retomar su actividad en lugares como Ciudad Satélite o la Zona Azul, donde las banquetas son cortas, pero se puede aprovechar una parte de espacio público.
El líder empresarial mencionó que este proceso no implicará nuevas inversiones, las cuales los restauranteros no podrían hacer ante los efectos económicos que les ha dejado la pandemia del COVID-19, por lo que solo prevén acondicionar y adaptar algunas mesas de los interiores para cumplir con las medidas sanitarias establecidas en la Gaceta de Gobierno del Estado de México.
Detalló que el primer día fue muy triste para los restauranteros que pudieron abrir este lunes, pues, al igual que en las semanas previas, las ventas se mantuvieron entre el 15 y 20 por ciento, aunque hay confianza en que la gente pueda regresar paulatinamente a sus establecimientos a consumir alimentos, pues se cuentan con todos los procedimientos del protocolo Mesa Segura.
Por su parte, el presidente de la Asociación de Bares y Restaurantes (Asbar), Patricio González Suárez, reportó que este lunes apenas abrieron 30 por ciento de los restaurantes que existen en la entidad, los cuales son los únicos que disponen de terrazas o espacios al aire libre para poder trabajar.
«El 80 por ciento de los restaurantes en el Estado de México son negocios familiares, micro y pequeñas empresas, que difícilmente cuentan con algun espacio al aire libre. Adicional a ello, los municipios con más restaurantes son Ecatepec, con casi ocho mil unidades, seguido por Nezahualcoyotl, con casi seis mil; localidades inseguros que difícilmente podrían exponer a sus clientes dando servicio en las banquetas», advirtió.
Agregó que, ante este escenario, la industria solicita que pronto se puesa brindar el servicio en interiores, cumpliendo con todos los protocolos sanitarios establecidos por las autoridades locales, ya que cada día está con mayor riesgo esta actividad, pues se estima que las pérdidas económicas ascienden a 35 mil millones de pesos para este sector en la entidad, con la desaparición de cerca de 80 mil empleos.