Netflix lo vuelve hacer y da en el clavo con una serie juvenil

Esta crítica se ha escrito después de ver la primera temporada completa de ‘Sex Education’ y no contiene spoilers.

Esta serie protagonizada por actores británicos consigue crear una atmósfera que produce un efecto de familiaridad, con este tipo de series juveniles en un entorno escolar ya visto en la cultura estadunidence (casilleros, la cafetería, las chaquetas de los deportistas, el baile de fin de curso…), pero usando el tono y el descaro de las series del Reino Unido.

La verdad es que de no haber sido por la presencia de Gillian Anderson -X files scully-  muchos habríamos ignorado Sex Education.

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De que va Sex Education

Nuestro protagonista llamado “Otis es un chico virgen y socialmente torpe, crea junto a una compañera una clínica de terapia sexual clandestina en el instituto después de que su vida familiar salga a la luz en la escuela: su madre es una famosa terapeuta sexual” (Gillian Anderson).

Sex Education es una dramedia, y su tono principal es el cómico, sobre todo al plantear las escenas sexuales (hay muchas, tenlo en cuenta al darle al play si hay niños en casa).

No todo es sexo en esta serie pues cuenta temas fundamentales en la vida sexual cotidiana como lo son: el aborto, la violencia por la orientación sexual o expresión de género, de homofobia, de la presión por la excelencia y de abandono familiar.

Esta es una serie muy consciente del momento cultural de estos tiempos pues mencionan temas tabú que antes no se podían mencionar.

Sex Education es una serie divertida y entrañable, que ofrece una visión positiva sobre el sexo, ademas usan la empatía para aquellos adolescentes que están en esa etapa placentera y complicada.

La recomendamos ampliamente y aceptamos reclamaciones si no quedan satisfechos. Solo recuerda que es una serie para mayores de edad pues muestran desnudos y escenas de sexo explicito.